Autoridades en Jerusalén informaron que se intentó incendiar una de las principales iglesias católicas de esa entidad, en el Monte Sión, durante la visita del Papa Francisco.
«Alguien entró en la iglesia, descendió a la cripta, se apoderó de un libro utilizado por los peregrinos y lo llevó a una pequeña sala cercana al órgano, donde prendió fuego el libro y quemó cruces de madera», informó Nikodemus Schnabel, monje de la Abadía de la Dormición.
Tras el suceso, los mismos monjes de la instancia controlaron las llamas utilizando extintores, mientras el lugar quedó cubierto con las cenizas de las cruces y algunos muebles quemados.
El vocero declaró que la policía se acercó al lugar y declaró que el incendio no había sido accidental.
Cabe resaltar que antes del suceso, el Papa Francisco había celebrado una misa en el cercano Cenáculo, lugar en el que se situó a la Última Cena y objeto de disputa entre el Vaticano e Israel desde hace dos décadas.
Desde La Plaza/ El Universal/ NCH