Se conoce el vídeo de una estación de gasolina de Barra de Tijuca, donde se encuentra la villa olímpica, en Río de Janeiro, allí se observa a los deportistas estadounidenses de natación implicados en un altercado con guardias de seguridad y que desmiente la versión de los atletas donde señalaban que habían sufrido un asalto cuando regresaban de una fiesta.
A inicios de semana Rayn Lochte, James Feigen, Gunnar Bentz y Jack Conger denunciaron haber sido víctimas de un asalto a punta de pistola por hombres que vestían uniformes de policía. Sin embargo, el jefe de la policía Civil, Fernando Veloso, ha explicado que la investigación realizada demuestra que el asalto no se produjo.
Según la policía brasileña, los deportistas, alterados y ebrios, tuvieron un enfrentamiento con agentes de seguridad en la gasolinera. Los deportistas habrían provocado daños en las instalaciones y se habrían negado a pagar, lo que obligó a intervenir a los agentes de seguridad.
Estudian presentar cargos
La policía brasileña ha acusado al grupo de nadadores de «dar un falso testimonio y vandalismo» y ha dicho que estudia presentar cargos contra ellos tras los incidentes ocurridos en la gasolinera.
Comportamiento «no aceptable»
«Pedimos disculpas a nuestros anfitriones en Río y al pueblo de Brasil por esta dura experiencia de distracción en medio de lo que debería ser una celebración», indicó el presidente del Comité Olímpico Estadounidense (USOC) Scott Blackmun.
El organismo subrayó que «el comportamiento de estos atletas no es aceptable y no representa los valores del equipo estadounidense o del comportamiento de la amplia mayoría de sus miembros». «Más adelante revisaremos el asunto y las potenciales consecuencias para los atletas cuando regresemos a los Estados Unidos», añadió.
DesdeLaPlaza.com/ Agencias