Un grupo de mujeres venezolanas, opositoras al gobierno del presidente Nicolás Maduro, atacó a una ex jueza venezolana y a su esposo, un viceministro del Gobierno del ex presidente Hugo Chávez, que actualmente están residenciados en la ciudad de Weston en el estado de Florida, EEUU, por creerlos afectos al «Chavismo».
La exjueza, fue identificada como Dayva Soto y su esposo, Rafael Jiménez, ex viceministro de Seguridad Jurídica en el Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia, cuando Jesse Chacón fue ministro de esa cartera.
Las mujeres con actitud violenta, le reclamaban a Soto actos judiciales como el de “apresar a Leopoldo López”, y entre insultos y amenazas les decían “te vas a tener que ir de Weston”…“yo me voy a encargar de que más nunca duermas”.
Las atacantes le reclamaban a Soto cómo se había comprado una lujosa mansión en una exclusiva urbanización de Weston, condado de Broward, si ambos eran funcionarios públicos asalariados, advirtiéndole que “No queremos chavistas en el imperio”.
Ante estos señalamientos en su contra la jueza, quien es abiertamente opositora, publicó una retahíla de post en su cuenta en Twitter donde asegura que ella fue la que sacó en libertad a Henrique Capriles Radonski, en 2004, cuando otros 10 jueces se habían inhibido, según lo reseña el «Diario Las Américas».
Incitación de un medio de comunicación
La información que produjo estas acusaciones, y el ataque a la integridad física de esta pareja, fue responsabilidad del portal web de oposición «Dólar Today», el cual publicó, acusaciones falsas, datos personales, así como la dirección de domicilio de la mencionada pareja.
Henrique Capriles confirma
Tras enterarse de este hecho, el gobernador del estado Miranda, Enrique Capriles Radonski, confirmó en su cuenta Twitter, en respuesta a un tuit de Soto, que fue ella quien le otorgó la libertad cuando estuvo preso.
Sigue la incitación a la violencia
Un usuario de la red social Facebook identificado como Hugo Fuguet, se solidarizó con Soto, y publicó un comentario ante este hecho con el cual parece seguir incitando al hostigamiento a todo aquello que se relacione con la Revolución Bolivariana y que esté fuera de nuestras fronteras.
Ahora que se enteraron que la ex jueza no es «Chavista», ¿les seguirá preocupando cómo compraron esa lujosa mansión en Florida si ella y su esposo eran unos asalariados?
¿Con que dolares habrán comprado estos ex funcionarios del gobierno venezolano está lujosa mansión ?
¿Fascismo o Nazismo?