El presidente boliviano, Evo Morales, no solo venció en las elecciones de este domingo, sino que logró su conquista tras superar todos los obstáculos que le impusieron desde Estados Unidos, con la complicidad de la débil derecha nacional, para frustrar el liderazgo que ha logrado en esa nación andina, en Latinoamérica y otros continentes.
Desde intentos de golpes de estados y campañas mediáticas hasta tratar de amedrentarlo durante una gira europea, en la cual se le impidió a su avión sobrevolar varios países europeos, no fueron suficientes para impedir que el bautizado Gran Jefe Indio Latinoamericano continúe la lucha al frente de su pueblo y la Pachamama (Madre Tierra).
Incluso horas antes del inicio de los comicios, los adversarios de Morales hackearon varios medios de prensa nacionales y difundieron informaciones falsas en las redes sociales sobre un eventual accidente o atentado sufrido por el actual mandatario boliviano, con el propósito de torpedear la consulta electoral.
Sin embargo, el Tsunami Azul, como le llamaron durante su campaña electoral, aplastó a sus contrincantes financiados por la Casa Blanca, y demostró una vez más a Washington que es un líder indiscutible regional y mundial.
Fuerza en todos los poderes
Evo Morales ganó con el 60% de los votos las elecciones bolivianas realizadas ayer y en su tercer mando consecutivo desde 2006 gobernará Bolivia hasta 2020, mientras que el Movimiento Al Socialismo (MAS) volverá a controlar dos tercios de la bicameral Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).
El presidente indígena Morales fue reelecto con casi dos tercios de los votos, alrededor de 5,1 millones de sufragios emitidos en Bolivia, sin contar los 200.000 de bolivianos en el extranjero, de acuerdo con los resultados extraoficiales citados por la agencia oficial ABI.
El MAS ocuparía 24 de las 36 bancas en el Senado y 80 de las 130 en Diputados, es decir 104 de los 156 escaños de la ALP, siempre de acuerdo con cálculos fundados en datos extraoficiales.
Morales en 2020 se convertirá en el hombre que más tiempo gobernó su país, 14 años, ganó en 8 de los 9 departamentos de Bolivia.
Por su parte, el empresario Samuel Doria Medina obtuvo el 25,1% de los votos con los que ocupa el segundo lugar y su partido Unidad Demócrata será la principal fuerza de oposición a Morales.
Mientras que el ex presidente, Jorge Quiroga, resultó tercero con 9,6%.En un discurso pronunciado anoche, el Presidente reelecto próximo a cumplir 55 años, convocó a la oposición a dejar de lado la confrontación y sumarse al trabajo conjunto por Bolivia.
“Muchas gracias hermanas y hermanos por este nuevo triunfo del pueblo boliviano … Este triunfo está dedicado a los que luchan contra el imperialismo. Está dedicado a Fidel Castro y a Hugo Chávez, que en paz descanse”, dijo el gobernante al celebrar su reelección.
Desde la Plaza/Varias Fuentes/AMH