El jefe de la Policía Nacional de Honduras, Ramón Sabillón, fue destituido este jueves tras la petición del secretario de Seguridad, Arturo Corrales. Ante esa orden la Comandancia de la Policía Nacional rechazó la destitución de Subillón y se pronuncia a favor de su continuación en el cargo dentro del organismo.
El corresponsal de teleSUR en Honduras, Gerardo Torres, informó que no hay mayores detalles de por qué se destituyó a Sabillón, sino que se espera una rueda de prensa del ministro de Seguridad para aclarar ese hecho y que se anuncie el nuevo titular de la policía.
Una de las versiones hace referencia a que el Gobierno quiere poner al frente de la Policía Nacional un elemento del Ejército. Pues las políticas de Juan Orlando Hernández se basan en la militarización de la seguridad.
Otro de los roces entre Gobierno y la Policía hondureña se debe a que Sabillón permaneció bajo perfil en San Pedro Sula, cuando el Gobierno le había pedido investigar la muerte de los fiscales, Marlen Banegas y Olga Eufragio.
Al parecer, la salida de Sabillón se había planificado hace semanas por problemas entre la Policía Militar y la Policía Nacional.
“Nuestra posición es de respeto hacia las políticas adoptadas por el presidente de la República y el espíritu de integración de los operadores de justicia es con el único objetivo de proteger a la población”, declaró durante una conferencia de prensa en las oficinas de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC).
Usuarios de Twitter y medios locales reportan que los altos mandos militares están acuartelados.
Desde la Plaza/teleSur/AMH