El Gobierno de Canadá presentó un proyecto de ley que plantea la despenalización de la prostitución pero castigará a los clientes de prostitutas y personas que posibiliten la práctica de este trabajo.
El proyecto de ley C-36 es el resultado de una sentencia de diciembre de 2013 en la que el Tribunal Supremo declaró inconstitucionales las leyes que criminalizaban la prostitución.
«No es un delito vender sexo por dinero» indicó el Tribunal de Canadá y dieron un plazo de un año al Gobierno canadiense para modificar la legislación.
La sentencia se logró gracias a las organizaciones que trabajan en defensa de las prostitutas, e indica que las leyes de ese país obligan a las trabajadoras sexuales trabajar sin ninguna protección y las empujan a vivir de manera ilegal.
El planteamiento considera ilegal la prostitución en lugares públicos donde se hallen niños, la publicidad de este acto, y en caso de desobedecer, la pena será hasta de cinco años para los compradores de sexo.
Peter MacKay, ministro de Justicia, señaló este miércoles durante la presentación del proyecto de ley que con esta iniciativa se pretende criminalizar «la compra de servicios sexuales y, en instancias muy específicas, la venta».
El plan ya ha recibido críticas por parte de las organizaciones que pidieron al Tribunal eliminar la anterior legislación, considerando que no ayuda a la seguridad laboral de las prostitutas.
Desde La Plaza/ Yoyopress/ KH