El aeropuerto Internacional de Santa Elena de Uairén (estado Bolívar) tiene más de 10 días paralizado por una protesta de la comunidad indígena de Maurak, perteneciente a la etnia Pemón, quienes hace más de siete años fueron desalojados de sus tierras por parte del Gobierno central para la construcción de esa terminal aérea, denunció Américo De Grazia, diputado a la Asamblea Nacional y secretario general de La Causa R.
«Les ofrecieron ciertos beneficios que hasta la fecha no han cumplido, por tal razón decidieron instalarse en la pista de aterrizaje a manera de protesta hasta ser tomados en cuenta por las autoridades». Señaló el diputado.
Además informó que «el conflicto se viene dando, porque las tierras utilizadas para la construcción del aeropuerto son tierras que eran propiedad de la comunidad Maurak; y el convenio era que ellos iban a recibir un conjunto de beneficios una vez construido el aeropuerto, los cuales no han sido cumplidos por parte del Estado Venezolano».
Esta es la segunda toma del espacio que hacen en menos de un mes y no han visto resultados. Esta protesta ha generado que comunidades enteras se encuentren aisladas.
En este sentido, el secretario culpó a Manuel Jesús Vallés, Alcalde del municipio Gran Sabana, por no velar por el bienestar del pueblo.
Desde La Plaza/EU/SE