El «grupo de contacto» sobre la crisis en Ucrania reúne en Bielorrusia a representantes de Kiev y Moscú, al día siguiente de las declaraciones de Vladimir Putin aludiendo por primera vez a la idea de una categoría de Estado para las regiones rebeldes del este.
Al mismo tiempo, la Comisión europea comenzará a trabajar sobre las nuevas sanciones contra Rusia, acusada por Occidente de haber desplegado tropas en apoyo a los rebeldes separatistas.
La Comisión presentará estas nuevas medidas antes del próximo fin de semana a los dirigentes de los 28, que tomarán una decisión «en función de la evolución de la situación sobre el terreno».
En Minsk, representantes de Ucrania, Rusia y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) participarán en la reunión del grupo de contacto.
Uno o varios representantes de los separatistas estarán presentes en la capital bielorrusa, anunció Andrei Purguin, «primer ministro adjunto» de la «República Popular de Donetsk (DNR)«, proclamada unilateralmente por los insurgentes.
«Espero que la discusión se centre en un alto el fuego«, había dicho el sábado en Bruselas el presidente ucraniano, Petro Poroshenko.
Putin aludió por primera vez a la posibilidad de que las regiones separatistas del este de Ucrania obtengan una categoría de Estado, cuyo término no definió, pese a las presiones de los occidentales.
El presidente ruso no aclaró el término de categoría de Estado, pero su portavoz, Dimitri Peskov, matizó el domingo esas declaraciones, al considerar que no se trataba de dar el estatuto de Estado a las regiones rebeldes sino que Ucrania debía «tomar en cuenta los intereses de Novorossia».
[youtube http://www.youtube.com/watch?v=GJR_ugZIWYI&w=560&h=315]Desde la Plaza/El Economista/AMH