«Durante la noche, 438 militares ucranianos se acercaron a los guardias fronterizos rusos para pedir asilo. Según la decisión del Servicio de Guardia de Fronteras de Rusia, sus funcionarios abrieron un corredor humanitario y permitieron entrar a Rusia a aquellos que necesitan refugio», dijo el portavoz del Servicio de la Guardia de Fronteras de Rusia, Vasili Maláyev, a la agencia Itar-Tass.
Agregó que entre los 438 militares que pidieron asilo a Rusia hay 164 guardias fronterizos ucranianos.
En las últimas semanas este tipo de episodios se han hecho cada vez más frecuentes. El domingo 12 militares ucranianos marcharon por la zona neutral de la frontera entre Rusia y Ucrania desarmados y con una bandera blanca. Según Maláyev, los militares, tanto oficiales como soldados, pertenecían a la 72.ª Brigada Mecanizada de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Los militares ucranianos explicaron que se les habían agotado las provisiones y que las municiones de las que disponían resultaron no ser adecuadas para los sistemas de fuego.
En julio 41 reservistas dejaron sus unidades militares y llegaron al punto de control ucraniano de Izvárino, controlado por las autodefensas. Les pidieron permiso para entrar de tránsito al territorio de Rusia debido a que no quieren luchar contra su propio pueblo.
Desde la Plaza/RT/AMH