Pocos son suficientemente dignos para escribir -mucho menos resumir- la vida de quien en su paso por el mundo dejó una estela tan grande, que resulta insuperable por su cualidad de única y autentica, sin precedentes, que ha producido admiración, envidia y orgullo durante generaciones, logrando que lo que muchos buscan y pocos obtienen: evadir el olvido y alcanzar la eternidad.
Hoy 26 de agosto, cuando se cumplen 103 años del natalicio del gran Julio Cortázar, intentaremos -con mucha humildad- recordar los momentos cumbres de la vida de este novelista, poeta e intelectual argentino, que marcó un antes y un después en la literatura hispana.
Como escribió Gabriel García Márquez en el prólogo de “Manual de Cronopios” en su edición de 1992: “Los ídolos infunden respeto, admiración, cariño y, por supuesto, grandes envidias. Cortázar inspiraba todos esos sentimientos como muy pocos escritores, pero inspiraba además otro menos frecuente: la devoción”.
- La hermosa región de Ixelles de Bélgica, vio nacer a Julio Florencio Cortázar Scott, el 26 de agosto de 1914, producto del trabajo diplomático de su padre. No obstante, su nacionalidad siempre fue argentina, la que asumió y defendió vehementemente, hasta que renunció a ella poco antes de su muerte, cuando optó por la francesa en protesta contra el gobierno militar que en aquel entonces estaba en el poder argentino.
- Su primer cuento, La Casa Tomada, fue publicado en 1946 un periódico literario llamado “Anales de Buenos Aires”, por iniciativa de nada menos que el famoso escritor Jorge Luis Borges, quien su director para aquel entonces.
- En la década del 60, después de la revolución cubana, el escritor visitó La Habana invitado por la Casa de las Américas y desde ese entonces se convirtió en un fiel pensador de la política latinoamericana. Es su obra La fascinación de las palabras dijo “La Revolución Cubana… me mostró de una manera cruel y que me dolió mucho el gran vacío político que había en mí, mi inutilidad política… los temas políticos se fueron metiendo en mi literatura”
- En su obras se denotaba su preocupación social y sensibilidad política: se identificó con los pueblos marginados y estuvo muy cerca de los movimientos de izquierdas.
- En 1963 presentó Rayuela, convirtiéndose esa novela en el mayor éxito comercial de su carrera.
- Sus relatos profundizan en lo fantástico, aunque con fuerte presencia de la cotidianidad, por lo que sus obras tienen siempre una deuda abierta con el surrealismo. Es considerado uno de los mayores innovadores de la lengua y la narrativa castellana, dado a los planteamientos existencialistas de su obra, de marcado carácter experimental.
- Contrajo nupcias en dos ocasiones, pero se dice que tuvo tres grandes amores.
- Su primera esposa (1953) fue Aurora Bernárdez, traductora argentina, con la mantuvo una relación durante 13 años.
- Tuvo un romance con la lituana Ugné Karvelis, quien le inculcó un gran interés por la política.
- La escritora estadounidense Carol Dunlop, fue su segunda esposa, con quien realizó numerosos viajes, uno de ellos relatado en el libro Los autonautas de la cosmopista. Tras la muerte de Dunlop en 1982, Aurora Bermuedez acompaña nuevamente a Cortázar hasta su muerte en 1984, siendo la la única heredera de su obra pública y libros.
- Cuando logró estabilidad económica, principalmente durante sus junto a Carol Dunlop, donó todas sus ganancias para ayudar a los presos políticos de Argentina, Chile y otros países latinoamericanos.
- Mantuvo amistad con grandes figuras de las artes y literatura hispana como Graciela Maturo, Pablo Neruda, Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez, solo por nombrar algunos. Amistades que quedan plasmadas en los más de 500 libros de su biblioteca personal, dedicados por estos y otros autores.
- Cortázar murió el 12 de febrero de 1984, en París, a causa de una leucemia. Su legado consta de siete novelas, nueve cuentos, más de una decena ensayos y artículos, numerosos epistolarios, entre otras proezas literarias.
DesdeLaPlaza.com /ABD