El jugador venezolano de béisbol, y relevo del equipo venezolano para el Clásico Mundial de Béisbol 2017, Bruce Rondón, presentó los zapatos que usará en competición.
La presentación la hizo el mismo Rondón a través de su cuenta de red social de Instagram, con el mensaje “Qué tal están mi gente”.
En otro mensaje, Rondón escribió «Al que no le guste que ni los mire ok».
Este calzado fue diseñado por la marca Adidas exclusivamente para el pelotero.
Resulta curioso que el diseño de este calzado, muestra en su parte inferior, justo al final del color rojo de nuestra bandera una simbología que no cuesta mucho descifrar.
Habría que preguntarle a Bruce Rondón y a Adidas, qué mensaje quieren trasmitir cuando colocan a nuestra bandera tricolor que pareciera estar sangrando, como si no fuera suficiente colocar nuestra tricolor patrio en la parte inferior del cuerpo como son los pies.
¿Será que Bruce Rondón nunca le enseñaron que la bandera nacional debe colocarse en todo lo alto?
El gobierno nacional debería ser uno de los primeros precursores en prohibir el uso del tricolor nacional como calzado.
¿Qué pensaría nuestro Libertador Simón Bolívar al respecto?
Recordemos que Bolívar cuando solo era un muchacho, tuvo la oportunidad de viajar a Roma, específicamente al vaticano, en su innata curiosidad por conocer al entonces papa VII, el gran inquisidor con sus Tribunales que castigaba las ideas modernistas; el protector de los jesuitas que esclavizaron al Nuevo Mundo a través de la Compañía de Jesús.
Cuando el Libertador llega al Vaticano, iba acompañado del embajador de España ante la Santa Sede, Don Antonio Vargas Laguna, (Bolívar debió recordar aquella fatídica fecha para América, cuando el 3 de mayo de 1493, el Papa Borgia, Alejandro VI, les concedió a los Reyes Católicos el derecho a gobernar los territorios descubiertos por los conquistadores).
Luego de una larga espera, la comitiva es recibida por su excelencia el Papa Pio VII… De lo ocurrido en ese recinto pontificio se han escrito varias versiones… Así lo narró el Padre Pedro Leturia:
“El Embajador, cuya Carrera Diplomática estaba comenzando, recibió de los Palacios, amigos de él en Madrid y parientes de Bolívar, una recomendación para que este joven, viudo, huérfano y tan golpeado por la vida, tuviera la oportunidad de ver al Santo Padre y recibir su bendición. El Embajador lo llevó a la Audiencia con el Romano Pontífice y según el protocolo, cuando el Santo Padre recibe a alguien en su Biblioteca como en esta oportunidad, se hace una reverencia al entrar, otra a mitad del salón, y otra junto al Santo Padre; en adelante el Papa es quien dispone de la entrevista; invita a sentarse, permanecer de pie, a pasear, etc… Lo cierto es que el Embajador Vargas Laguna, al llegar junto al Santo Padre, se arrodilló, le besó la sandalia y quiso que el joven que le acompañaba hiciera lo mismo, pero él se resistió; entonces Vargas agarró a Bolívar por el cuello y quiso obligarlo, el Papa se dio cuenta y regañó en italiano a Vargas Laguna, diciéndole: deje al joven americano en paz. La audiencia continuó sin mayor inconveniente y, al salir el Embajador, le preguntó al joven Bolívar: ¿Cómo es posible que usted me dejara en ridículo ante el Santo Padre? Bolívar le contestó: Señor Embajador, yo me ceñí al protocolo y Yo no le adulo a nadie, así sea el mismo Pontífice… Muy poco debe estimar el Papa… replicó Bolívar… el signo de la religión cristiana, cuando lo lleva en sus sandalias, mientras los más orgullosos soberanos de la cristiandad lo colocan sobre sus coronas”
Este suceso inesperado para la Corte de cardenales, fue más tarde referido por el propio Papa Pio VII, cuando empezó a preocuparse por la suerte de su iglesia en las nacientes repúblicas americanas:
“Simón Bolívar, Libertador…! ah ya recuerdo… ese fue el joven que se negó a besar la cruz de la sandalia papal, pretextando que correspondía a la cruz lugar más elevado”.
Según la Ley de Bandera Nacional, Himno Nacional y Escudo de Armas de la República de Venezuela, promulgada en 2006, los símbolos de la patria «deben ser respetados» por los venezolanos y por los extranjeros.
Reflexión para Bruce, Adidas y el Gobierno Nacional ¿Muy poco estimamos nuestro tricolor patrio para colocárnoslos de zapatos?
¿Será que nuestro tricolor patrio se merece el lugar más elevado?
DesdeLaPlaza.com/Agencias/Rubén Scorche