Aunque las protestas sacuden las ciudades más importantes de Brasil a casi un mes de la Copa Mundo, en las favelas ya se vive un ambiente de fiesta. Las miradas se centran en el país anfitrión mientras los pequeños juegan al fútbol con sus balones desgastados en solares polvorientos soñando con ser el próximo Neymar.
A unos cuantos kilómetros del Maracaná, se encuentra una favela que en el 2002 se hizo famosa por retratar el estereotipo de violencia que se vivía al interior de los barrios marginales brasileños. Pero hoy, en la favela Ciudad de Dios no se disparan mensajes de violencia sino los sueños de unos pequeños que con sus cámaras fotográficas intentan retratar el fervor con el que se vive fútbol en Brasil.
Christophe Simon, es un periodista gráfico que ha capturado bajo su lente numerosos eventos que han marcado la historia en el mundo árabe, en África, los Balcanes y recientemente se ha anticipado a la preparación del evento que promete robarse las miradas del mundo entero con la celebración de la Copa Mundo 2014 en Brasil.
Tras su llegada a Río de Janeiro en el 2011, este reportero gráfico de la Agencia AFP ha participado de numerosas operaciones de “pacificación” que adelantan el ejército y la policía con el fin de mejorar las condiciones de seguridad como parte de los preparativos para la celebración del mundial y los Juegos Olímpicos en el 2016.
Agrupados a su alrededor, acompañándolo por las sórdidas calles mientras retrataba el intento gubernamental por recuperar el control de las favelas, decenas de niños encaminan el recorrido de este fotógrafo francés mientras lo interrogan y se muestran asombrados cada vez que Christophe saca sus cámaras en los largos recorridos en donde solo había ojos para contemplar sus ‘teleobjetivos’.
“Celebré mis 50 hace cuatro años, una edad en la que se empieza a desear transmitir conocimientos a aquellos más jóvenes. Y así fue como me vi abocado a crear este proyecto” relata Christophe mientras explica cómo de la mano de Tony Barrios un fotógrafo de la favelas se aventuraron en un proyecto de formación en donde un grupo de voluntarios entre los 10 y 15 años equipados con cámaras Nikon emprendieron un viaje para capturar su propio mundo y el fervor que se vive por futbol, el deporte por excelencia en Brasil.
“Son unos niños que no tienen muchas opciones dentro de las favelas por lo que cuando aprenden una cosa lo hacen con mucha concentración” cuenta en entrevista con semana.com mientras narra esta apasionante experiencia que les permitió a los pequeños no solo conocer o afianzar sus destrezas sino también acercarse a un mundo que sólo hacía parte de sus sueños. “Estuvimos en Copacabana e Ipanema era la primera vez que iban, como un sueño”
“Antes del proyecto quería ser periodista. Ahora, me gustaría convertirme en fotógrafa para hacer reportajes sobre la actualidad o la moda”, dijo a la Agencia AFP Silvana de Araújo, una de las voluntarias al proyecto.
“Les enseñé los rudimentos de la profesión y les impuse algunas normas básicas, como la prohibición de hacer posar a la gente o emplear el flash. La experiencia fue apasionante y el resultado sorprendente”
Los dos formadores y líderes del proyecto seleccionaron setenta fotografías, ahora disponibles en la plataforma de difusión fotográfica de AFP. La totalidad de los ingresos de las ventas se entregarán a la asociación Casa Geraçao, dedicada a ofrecer actividades de profesionalización a los jóvenes de las favelas.
Mientras, la agencia AFP espera continuar el proyecto con una segunda fase, en la que los niños aprendan edición y fotoperiodismo.
Desde la Plaza/ Semana/ AMH