El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, aseguró este sábado que el día que sus jugadores no le sigan, dejará el banquillo azulgrana, una circunstancia que, según dijo, aún no se ha producido.
En la previa del vital partido del domingo ante el Atlético de Madrid, el técnico asturiano defendió a sus ayudantes, al afirmar que “el responsable de todo lo malo” es él y subrayó que está “preparado para asimilarlo”.
“El día que vea que mis jugadores no me siguen, ese día lo dejo, y eso aún no ha pasado”, aseveró Luis Enrique en una rueda de prensa un tanto tensa en la que se aclararon las informaciones sobre su futuro en el banquillo azulgrana.
El asturiano prefirió no “alimentar polémicas” sobre su futuro, si bien al ser preguntado sobre si siente respaldado por la directiva, se mostró un tanto enigmático: “No se trata de sentirse respaldado o no; se trata de hacer mi trabajo”.
Y, en este sentido, el técnico del Barça añadió: “Me siento reforzado, optimista, con muchas ganas e intento dar la mejor versión de mí mismo”.
En una comparecencia marcada por la situación enrarecida del equipo y las especulaciones sobre una supuesta mala relación entre él y la estrella del equipo, el argentino Leo Messi, Luis Enrique dijo sentirse “centrado y motivado” en lo que puede controlar.
No obstante, admitió que existe cierta “tensión” en el ambiente, algo que, según pronosticó, acompañará al equipo a lo largo de la temporada.
Desde La Plaza/EFE/COM