El sueco Zlatan Ibrahimovic admitió esta semana que le gustaría formar parte de la Liga Profesional de Fútbol de Estados Unidos (MLS), petición que se une a la de otra cantidad de estrellas de fútbol internacional.
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«No tengo ninguna duda de que me gustaría jugar en la MLS», declaró Ibrahimovic, de 33 años, a Yahoo Sports. «Además pienso que hacerlo podría ser una experiencia increíble. Veo lo mucho que ha crecido el fútbol en Estados Unidos. Estuve aquí hace 10 años y no tenían el nivel de ahora, que además sigue creciendo en la dirección correcta para alcanzar lo que hay en Europa».
De momento, Ibrahimovic tendrá que definir cuál será su futuro en el fútbol europeo, si va a continuar con el equipo francés o vuelve con el Milán. La declaración de Ibrahimovic confirma también la tendencia de que la MLS se ha convertido en la liga «ideal» para que las grandes estrellas terminen sus últimos días como profesionales tras dejar de ser competitivos en las mejores del mundo.
Las últimas incorporaciones de jugadores más jóvenes como el italiano Sebastián Giovinco y el mexicano Giovani dos Santos, profesionales que nunca han llegado a ser estrellas en el fútbol europeo, no altera la inercia que se da dentro de la MLS de conseguir no el mejor fútbol de las estrellas, ya que sólo pueden aportar su experiencia, pero sí que vendan entradas y camisetas.
El inglés Beckham con el Galaxy de Los Ángeles, fue el pionero en el inicio de la filosofía deportiva comercial que se vive dentro de la MLS, una liga que posee ya 20 equipos.
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