Con el fallecimiento de la pluricampeona del buceo Natalia Molchanova, surge la impresión de que este deporte, al final, termina llevándose a sus grandes atletas . Y es que antes de la rusa, otras figuras de esta disciplina han perdido la vida en el fondo del mar.
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La muerte cerebral repentina causada por las altas presiones sorprendió a muchos atletas durante los entrenamientos y hasta compitiendo. La especialidad de apnea sin límites, en que la que se desciende con propulsión y se usa un globo para retornar a la superficie se considera como una de las prácticas extremas más mortales junto al salto base.
Pero, ¿quiénes son los otros atletas que han fallecido durante la práctica de este deporte? Aquí te los presentamos:
Nicholas Mevoli
En el 2013, durante el invierno europeo, el norteamericano Nicholas Mevoli, a sus 32 años, arribó a las Bahamas para intentar un nuevo récord de inmersión a pulmón, pero no lo logró pues falleció bajo las aguas.
Mevoli, pretendía alcanzar los 72 metros, pero a los 68, tuvo que darse la vuelta y los casi cuatro minutos que pasó sin respirar terminaron siendo letales. Pese a que salió a la superficie consciente, igualmente se desvaneció en pocos minutos.
El buceador fue el tercero en peso constante sin aletas en el Mundial de aquel año y poseía los récords de su país en varias categorías.
Loïc Leferme
El francés ostentó de 2002 a 2005 el récord más espectacular, el descenso más profundo tras bajar hasta los 171 metros. Pero en 2007, falleció durante un entrenamiento en la bahía de Villefranche-sur-mer.
De acuerdo a varias fuentes, el globo que portaba para el ascenso no funcionó e intentando por sí mismo el regreso, sufrió una parada cardiorrespiratoria.
Audrey Mestre
A sus 28 años, la francesa pudo descender más que ninguna otra mujer en la historia, bajó 166 metros de calado, frente la playa Bayahibe de la República Dominicana en 2002.
Su hazaña recogió artículos por todo el planeta, pero a penas 8 días después, Mestre quería superar su propio logro y así descender a los 171 metros, pero se presentó un percance con el globo causándole la muerte.
¡Paz a sus restos!
DesdeLaPlaza.com/elmundo.es/KC