Por: Ennio Di Marcantonio
La lucha del rock, sobretodo del Rock Nacional, por su permanencia, y un horario justo que la TV privada nunca le dio, y que solo hoy ha logrado, data de los propios inicios del género
Fue en 1979, un miércoles en la noche, por la antigua Televisora Nacional, el día, momento y lugar elegidos para el espacio que por primera vez daba la televisión venezolana, formalmente, al rock: La música que sacudió al mundo, del histórico locutor Alfredo Escalante, quien nos dejó este 2016.
Este espacio pionero del Rock Nacional, nacido en 1979, no duraría mucho. Y como estamos en la onda de hacer historia precisa, más allá de los dos responsables más conocidos del fracaso de la TV pública en el siglo XX, aclaramos que no fue el gobierno de Jaime Lusinchi, como se pensaba, el que sacó del aire ‘La música que sacudió al mundo’. Fue Rubén Osorio Canales, terminando el quinquenio del presidente Luis Herrera Campins, el que tomó medidas, por primera vez, contra el Rock Nacional en la TV.
En el diario ‘El Nacional’, otrora medio de comunicación, se informó el 12 de junio de 1982 de “Un nuevo golpe a los rockeros”, definiendo así la suspensión del programa de Alfredo Escalante. En dicha noticia se explicaba que: “La medida obedeció a que… el animador hacia cuñas promocionando algunos eventos en los que participan grupos al estilo de Arkangel, lo cual está prohibido en el Canal 5, planta no comercial del Estado” (¿informar sobre eventos de rock era hacer publicidad para aquella directiva de Televisora Nacional?)
Alfredo Escalante, al explicar el porqué de su salida del aire, demostró el estado deplorable en que estaba la televisora pionera de Venezuela: “Quizá puede ser que debido a la falta de equipo, el personal técnico del Canal 5 encargado de las operaciones no puede soportar el peso de hacer programas, por lo que todo lo que se transmite tiene que ser enlatado… El martes pasado (8 de junio de 1982) tenía que grabar, y cuando fui a buscar el video no lo habían pasado a ‘una pulgada’ (procedimiento técnico indispensable para transmitir la cinta), por lo que hubo un retardo, ya que solo pude hacer la presentación y la despedida. Al día siguiente fui temprano a montar el resto del programa, porque debía transmitirse esa misma noche, lo cual se consiguió gracias a la autorización previa de Genaro González, Jefe de Producción del Canal 5, quien esa misma tarde me entrego el memorándum suspendiéndome…”
En el siglo XXI por primera vez, sin censura, el Metal se visibiliza como cultura, incluso en la TV privada (con programas como ‘Infrarrojo’, de Puma-TV) pero fue la TV Pública, con ‘El Garaje’ (VTV) o ‘Leyendas del Rock’ (Tves) la que más espacio ha dado al rock.
El último escollo que faltaba superar, se superó hace apenas unas semanas: El horario en que se transmitían estos programas de rock.
Ciertamente, por la sensibilidad que pueden encerrar sus duros mensajes, principalmente su crítica a lo errado de la sociedad, y la fuerza de sus videoclips, el rock y el metal están irremediablemente limitados a la noche (horario supervisado, o adulto)
Ahora bien, la lucha no estaba en la franja del día, sino en un horario aceptable para un público como el rockero, el metalero, que en su mayoría trabaja en el mismo horario diurno que cualquier otro ciudadano.
Kultura Rock comenzó su etapa actual en Tves los domingos a las 11 de la noche (donde tuvo que enfrentar constantes interrupciones, hasta de programas que ya habían sido transmitidos, que llegaron a ‘rodar’ este espacio del Rock Nacional hasta las madrugadas del lunes, a las 4 am, casi al rayar el alba)
Luego el programa de Paul Gillman fue mudado a los miércoles, a las 11 de la noche (más conveniente, tanto, que sigue siendo horario del programa, pero para sus repeticiones, o para transmitir los programas que por alguna razón no se transmiten) hasta lograr su horario actual: Sábado, a las 11 de la noche. Un verdadero logro que dejó en el pasado el desprecio histórico al rock, cuando se ha tratado de darle un horario estelar en la TV.
A diferencia del grupo español, Warcry, en Venezuela estamos brindando, ya no por desertores a la lucha por el rock y metal, sino por el avance que hoy, en un país libre, donde todas y todos por fin estamos en el paisaje, ha logrado el rock y el metal venezolano… ¡Punto para TVES!