Debo admitir que me sorprendió de una forma inexplicable la muerte de Dolores O’Riordan, vocalista de The Cranberries. Si bien es cierto que uno no la conocía de una forma directa, yo creo que ya el simple hecho de saber quién es y que su voz o sus canciones te llegaran de alguna forma ya crea cierto vínculo.
De The Cranberries no es que haya sido un fiel seguidor o me sepa toda su história, pero sí tengo claro que fue una banda icónica de los años 90. Hace apenas unas dos semanas me había atacado uno de esos días en los que nos da por escuchar canciones viejas, emblemáticas. ‘Zombie’ y ‘When you’re gone’ fueron dos de ellas.
La voz de Dolores era impresionante, lástima que la hayamos perdido. Pero esa voz, esa fuerza y esas letras creaban un completo placer al momento de escucharla y admirarla. El video de ‘Zombie’, tema perteneciente al álbum ‘No Need To Argue’ (1994) de por sí, me causaba intriga, hasta que supe todo el significado que hay detrás de él.
Resultó que ‘Zombie’ representa entonces, como principal apuesta, la idea del actuar sin sentido, sin raciocinio. Hacía referencia y homenaje a dos niños que fueron asesinados durante un atentado con bombas que ocurrió en 1993 en un barrio de Inglaterra; fue perpetrado por IRA, un grupo terrorista del bando católico. Se trata de una canción de protesta y por ello se presencian tantos menores en el video, además de otros elementos simbólicos que se hacen presente en el audiovisual y que reflejan la situación de guerra y diferencias que se vivía -al igual que ahora- en ese entonces. “¿Qué hay en tu cabeza, en tu cabeza? Zombie, zombie, zombie”.
Otra de mis favoritas es ‘When You’re Gone’, en contraparte de ‘Zombie’, esta es una balada mucho más nostálgica. Se trata de una canción de amor en la que Dolores demostraba una innegable añoranza.
En un momento, la cantante, quien falleció a la edad de 46 años, dijo que el disco al que pertenece la canción, ‘To the Faithful Departed’ (1996), estaba dedicado a “gente entrañable que ha muerto y está dedicado a todos ellos, pero al mismo tiempo se refiere a la pérdida de la inocencia y de la ingenuidad que se enreda con el crecimiento. Es acerca de la pérdida de las personas que te enseñaron a amar”.
Continuó explicando que escribió la canción cuando su abuelo agonizaba, pero luego pensó en sus hijos y en su padre, quien también murió. Decía Dolores que cuando se interpreta una canción acerca de la pérdida, “puede adquirir diferentes significados con base en lo que vives en un momento determinado”. Quizá por eso es que muchos encontramos en esta -u otras canciones- mucha identificación. Nosotros que siempre estamos perdiendo a alguien.
Sin duda, son dos grandes temas dignos de destacar de The Cranberries. Pero también están estas canciones completamente recomendadas y que evidencian todo el talento de aquella chica que llevaba siempre el cabello corto, quien en el 2015 reveló que padecía de bipolaridad y depresión.
https://www.youtube.com/watch?v=Zz-DJr1Qs54https://www.youtube.com/watch?v=Yam5uK6e-bQ