Vamos a seguir en cuarentena hasta tanto logremos vencer la pandemia producida por el coronvirus.
Hemos aprendido mucho en torno a este virus de laboratorio, construido por el Imperio yanqui-sionista para exterminar parte significativa de la humanidad o aterrorizarla y mantenerla así sujeta y en beneficio de las pequeñas élites que conforman los amos del mundo.
Creado en un laboratorio, bajo la supervisión del Pentágono, el Covid-19 nace para enfrentar, en primer lugar, a China, el país con mayor poder en paridad para darle un vuelco a la economía capitalista, tal como la hemos padecido hasta el presente.
Lo cierto es que la única protección posible sin vacuna, es el aislamiento social, la cuarentena, quedarnos en casa mientras se aplica la proliferación agresiva de la molécula que genera la patología mortal del coronavirus, en seres humanos.
Es muy probable, casi cierto, por la tendencia de agresión genocida de los amos del mundo y su Imperio yanqui-sionista, que al momento de nacer la molécula denominada coronavirus, también estaba naciendo la anti-molécula o «vacuna» de protección o inmunización de la acción de la primera, convertida en virus.
Claro, allí entran en juego muchísimos factores de dominación y hegemonía que son los que determinan cuándo -o a qué costo de exterminio genocida- es el «mejor momento» para anunciar la vacuna y comenzar a aplicarla.
La verdad verdadera es que la expresión paroxística de esta pandemia encierra un fondo, una raíz, eminentemente cultural. La cultura de dominación capitalista, cultura de y para la muerte, sólo puede ser superada por la cultura genuina de la humanidad o cultura para la vida.
Esa es la cultura en pugna revolucionaria del proletariado por alcanzar su liberación y la vida, es decir, la cultura de y para la vida. La vacuna de vida, de inmunización contra la muerte sembrada en todas las cosas por el capitalismo.
Es aquí donde cobra importancia y gran significación la tarea del periodismo (como una más, no como tarea única ni preladora) para contribuir a inmunizar a la humanidad frente a toda pandemia, como la presente, el coronavirus o cualquier otra.
Para entender esto último es que resulta importante entender la labor de un periodismo por amor al arte y a las culturas, como el que viene haciendo desde hace 16 años, el semanario Todasadentro.
No es grandilocuencia ni exageración de los significados, pero el periodismo, en Revolución, en cualquier revolución anticapitalista, antiimperialista y cultural, tiene por misión, librar la batalla contrahegemónica y ganarla.
Llámese Todasadentro o como se llame, el compromiso es el mismo, desde el campo fundamental de las ideas y de lo simbólico.
Por eso, cómo no alegrarse de la perseverancia revolucionaria de un medio como éste que, en Venezuela y para la Revolución Bolivariana, creó el Comandante Hugo Chávez.
La vacuna es cultural y Todasadentro alcanzaremos la inmunidad y la derrota definitiva de todo imperio. Necesario es perseverar para vencer y juntos viviremos y venceremos.
Ilustración: Iván Lira