El 5 de enero de cada año comienza, en Venezuela, el primer período de sesiones ordinarias de la Asamblea Nacional. Así está establecido en la Constitución de la República Bolivariana.
El 5 de enero de este 2021 un nuevo cuerpo legislativo inicia sus funciones luego de las elecciones de parlamentarias y parlamentarios, celebradas a comienzos del mes de diciembre del pasado año.
Coincide en comenzar a sesionar nuestra Asamblea el mismo día consagrado en el santoral de la religión católica para celebrar el «Día de Reyes». Una fiesta en la que, supuestamente, tres astrólogos provenientes de diversas regiones de Oriente, coincidieron en estar dedicados a la común tarea de investigar el brillo incandescente que resaltaba en el oscuro cielo decembrino, como si se tratase de una estrella de características especiales.
Es posible que desde aquel entonces se estuviese haciendo visible la alineación de planetas como Saturno, Júpiter y Urano, de la misma manera como ocurre en la actualidad mientras hay reyes o magos que pronostican ahora la entrada de nuestro planeta Tierra en lo que se ha dado en llamar la Era de Acuario.
El sorprendido trío (hay quienes dicen que fueron 12 y hasta más) que siguiendo la luz de aquella «estrella» o alineación bi o tri planetaria logró llegar hasta un rancho o establo ubicado en la pequeña ciudad de Belén, donde acababa de nacer el hijo de la pareja conformada por María y José, un par de nómadas movilizados por las presiones del régimen encabezado por el rey Herodes.
Herodes, como lo destacamos en un artículo anterior, era un personaje perseguido por su propio ego de monarca el cual despertaba sus reales miedos de perder el poder ante un Mesías Salvador de Jerusalén y el mundo, nacido en cuna pobre.
Sea como fuere (porque existen innumerables versiones) hace unos dos mil años hubo una coyuntura en la que la dialéctica poder y sabiduría colocaron en vilo a la humanidad y dejaron los resultados que hoy conocemos guardan cierta similitud radical en sus características signadas por los cambios y las expectativas de un nuevo mundo de liberación, fraternidad e igualdad.
Al Nazareno llegaron los sabios, los que sintieron en sus corazones que una nueva era de luz estaba comenzando para la humanidad. Pero aquellos visitantes, simbolizados en número de tres, fueron trastocados por reyes: la egolatría del Poder «otra vez triunfó» (como el «vil egoísmo» en nuestro himno patrio).
Hoy, propongo para este Diálogo reflexionar y construir juntos a partir de la recién nacida Asamblea Nacional de Venezuela, que comienza presidida por el compatriota Jorge Rodríguez.
Si es el afán de poder el que determina el camino -propuesto por el Comandante Chávez como Revolucionario y Bolivariano- de esta Asamblea,quizás terminemos siendo una nueva religión de los poderosos, visitada y reconocida por los amos del mundo y sus egóticos reyes. Si es la sabiduría del espíritu solidario y cooperativo del universo la que prevalece, entonces estaremos entrando de verdad en la nueva vida, en la nueva Era, iluminada también en Venezuela, por Carabobo independentista hace 200 años.
Ilustración: Alberto Durero / 1504