A 52 años del vil asesinato del Guerrillero Heroico, Ernesto Guevara de la Serna, Che quien había caído herido en combate en medio de una emboscada por rangers estadounidenses secundados por soldados bolivianos al servicio del mismo Imperio, la historia presente de la lucha de clases nos confirman cuán vivo sigue entre nosotros y orientando con su ejemplo la revolución proletaria y socialista.
Medio siglo después de la metralla rasgando su cuerpo y acabando con sus latidos y su respiración, un corazón pleno de amor sigue latiendo de vida en los pueblos nuestroamericanos que se alzan en contra de la explotación, de las injusticias y de sus causantes, el capitalismo, el imperialismo como fase superior del mismo y el neoliberalismo como expresión coyuntural de las pretensiones de perpetuación de ese sistema de oprobio y miserabilización de la humanidad.
Este octubre guevariano de 2019 también recuerdo de su multiplicidad de facetas que lo definen en la totalidad de revolucionario: «¡Qué sean como Che!», quienes quieran serlo también, decía el comandante Fidel Castro en una reflexión profunda frente a sus restos y la presencia de numerosos pioneros cubanos, entre otra multitud atenta. El más alto eslabón de la humanidad: ser revolucionarios, como Che.
Me detuve ante un libro que nos dejó Ángel Méndez, un colega periodista venezolano fallecido hace poco, a quien correspondió asistir, como corresponsal del diario para el cual trabajaba en Caracas, a la exhumación de los restos de Che, hallados en una abandonada fosa cercana al aeropuerto de Vallegrande, en Bolivia, donde fueron dejados para que desaparecieran de olvido con el pasar del tiempo.
Méndez se ocupó de arquear toda la hemerografía impresa para la época, justo después de tres décadas de que el imperialismo intentara asesinar también la memoria de un revolucionario que ya se sabía inmortal. Era el momento cuando las corporaciones transnacionales de la información debieron «resucitar» a Che, tal como lo indica desde el título de su obra el talentoso periodista venezolano: «El día cuando las agencias de noticias resucitaron al Che».
Guevara de La Serna, empujado al olvido, a la mentira, a la falsa noticia o al intento por hacer de su estatura Che, Guerrillero Heroico, una fake news para que a las generaciones posteriores no les pasará por sus cabezas el sueño de generar pesadillas en el Imperio yanqui, del tamaño de «dos, tres, muchos Vietnam… hasta la victoria siempre».
Pero Che es inmortal y su decisión bravía de liberación con convicción proletaria, está y sigue presente en las luchas de Cuba, Nicaragua, Venezuela y todos los pueblos que avanzan hacia su descolonización e independencia definitiva en el mundo entero, tal como lo vemos y sentimos deben el palpitar de pueblos como el indígena y campesino de Ecuador enfrentando hoy el paquete de medidas neoliberales impuestas por el FMI a través del traidor Lenin Moreno y las consecuencias de su intento por aplicarlas.
Definitivamente, Che vive y no porque “las agencias de noticias” lo hayan resucitado. Vive y venceremos.
Ilustración: Foto portada / I.P.B.