Estafadoras de Wall Street (2019) está actualmente en cartelera
Socialmente los hombres son valorados por el dinero y las mujeres por la belleza. Era así en los años cincuenta y de algún modo sigue siendo así en el 2019. Tener dinero es importante para los hombres, les otorga poder. Ser bella es un arma que muchas mujeres utilizan, aunque es su recurso más primario, también quizás es uno de los que puede generar más impacto. Cada uno se defiende como puede sobre todo cuando se encuentra en una situación desesperada en la que vale todo.
En Estafadoras de Wall Street (2019) el dinero y la belleza son una combinación explosiva. El dinero que tienen los hombres y la belleza de mujeres que la usarán para obtenerlo. La historia de bailarinas que transcurre en un club nocturno protagonizada por Jennifer López, Constance Wu, Lili Reinhart y Cardi B está inspirada en hechos reales que sucedieron en medio de la crisis financiera de USA en 2007 y 2008.
Lorene Scafaria dirige esta cinta sobre chicas tratando de ser libres utilizando el recurso más elemental, pero también el que ha representado durante décadas su mejor carta de presentación. En la cinta los hombres caen en la trampa que ellos mismos crearon generando muy buenos dividendos a un grupo de mujeres desesperadas y con graves problemas financieros.
La película no parece pretender suscitar un juicio de valor, aunque obviamente la mirada de la directora defiende a las protagonistas incluso de sus propios actos. Scafaria no solamente cuenta una historia, toma partido y saca la cara por las chicas que hacen de la noche el escenario para su «negocio» ilícito.
El discurso de Estafadoras de Wall Street (2019) funciona porque es dinámico, con una estética de videoclip narra los hechos sin que puedas detenerte a pensar en las implicaciones morales de las decisiones que toman las protagonistas. La narración te va llevando a su mundo hasta perderte en él. Quizás ese es el mayor mérito de la película: seduce. Entretiene y encanta tanto como el baile de Jennifer López en una de sus escenas principales.
Uno de los mayores atractivos del largometraje y la razón de su alto nivel de entretenimiento son sus protagonistas. La belleza, que genera siempre interés, es parte fundamental del cóctel que permite que Estafadoras de Wall Street logre hipnotizarte.
Sin embargo, más allá del oropel y el brillo de los vestidos de las actrices hay buenas actuaciones que sustentan momentos dramáticos y divertidos.
El discurso «feminista» que se le adjudica a la cinta puede tener sentido si pensamos en que la película, en primer lugar, está contada desde una perspectiva única y exclusivamente femenina. Además es también la historia sobre un grupo de mujeres que trabajan juntas por un bien común. Es el relato de una amistad, de una relación estrecha entre mujeres que no compiten entre sí, por el contrario se ayudan mutuamente. Mujeres que no quieren ser utilizadas por los hombres y que han decidido devolver el golpe: usarlos de vuelta implementando las armas que tienen para «hacer justicia» en un mundo patriarcal que todavía las orilla a ser consideradas ciudadanos de tercera.
Más allá de juicios éticos la película es estéticamente emocionante y posee momentos por los que vale la pena ir a verla. No te la puedes perder.
@luisauguetol