La divulgación de documentos sexuales, tanto vídeos como fotografías, como venganza o castigo a anteriores parejas sentimentales se ha popularizado en los últimos meses y Japón fue el primer país en aprobar una norma que castiga y establece distintas multas al responsable de la difusión.
En concreto, el Parlamento nipón ha establecido una ley que regula este tipo de delitos relacionados con contenido sexual de su ex y que fue calificado como «porno de la venganza«. La Cámara Alta de Japón aprobó penas de cárcel de hasta 3 años y multas que oscilan los 5.000 euros, dependiendo de la gravedad de los documentos publicados.
Estas sanciones afectarán a los responsables de difundir vídeos o fotos de sus exparejas después de una disputa sentimental, pero si deciden facilitarlo a una tercera persona para que lo propague por la red también serán castigados. En este caso, la pena de cárcel se reduciría hasta un año y la multa rondaría los 3.000 euros.
La nueva regulación llega a colación de un asesinato que conmocionó al país. Una joven japonesa fallecía a manos de su exnovio, que previamente había difundido fotos sexuales de la chica a través de la red.
La norma aprobada por los diputados nipones sigue los pasos de las actuales regulaciones de algunos estados de Norteamérica, aunque sienta precedente a nivel internacional. A priori, varios países están estudiando este apartado y establecerán respectivas regulaciones en los próximos meses
Desde la Plaza/Qué/AMH