El jefe de la inteligencia estadounidense, James Clapper, indicó este lunes en Washington que no había signos, por el momento, de que un acto terrorista fuera el origen de la caída del avión ruso en el Sinaí.
Clapter, director nacional de inteligencia (DNI), estimó, además, como “improbable” que el grupo Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) contara con los medios para derribar un avión comercial en vuelo; a la vez que precisó, no obstante, que no podía aún “excluir” esa posibilidad completamente.
Leer más: Siniestro aéreo en El Sinaí: 144 cadáveres llegaron este lunes a Rusia
Sin embargo, resaltó que ISIS tiene una presencia significativa en la Península del Sinaí donde se estrelló el avión.
“Los soldados del Califato lograron abatir un avión ruso en la provincia del Sinaí, que transportaba a más de 220 cruzados, y todos murieron”, afirmó el grupo extremista en un comunicado colgado en sus cuentas de Twitter, en las que aseguraban haber actuado en represalia a las “decenas de muertos (causados) a diario por los bombardeos” de los aviones rusos en Siria.
Por otro lado, el titular de la Agencia Federal Rusa de Aviación reprendió al propietario del avión que se estrelló sobre Egipto el sábado por señalar una causa del incidente antes de que los investigadores tengan datos suficientes para llegar a alguna conclusión.
Un dirigente de Metrojet identificó el lunes un “impacto externo” como la única causa probable de la destrucción del avión, descartando la posibilidad de una falla técnica o un error de piloto.
A bordo viajaban 217 pasajeros –214 rusos y tres ucranianos– y siete miembros de la tripulación. Según el ministerio ruso de Situaciones de Emergencia, los pasajeros tenían entre 10 meses y 77 años.
El último accidente aéreo en Egipto se remontaba a enero de 2004 y había causado 148 muertos, en su mayoría turistas. Sin embargo, desde la revuelta de 2011, que expulsó del poder a Hosni Mubarak y tras los años de caos que siguieron al derrocamiento por el ejército del presidente islamista Mohamed Mursi, el turismo está alicaído.
DesdeLaPlaza.com/Infobae/COM