La coalición de partidos de la oposición venezolana anunció este lunes que el de hoy dará el primer paso, para avanzar en la conformación del Gobierno de Unión Nacional con la firma del Compromiso Unitario para la Gobernabilidad, por parte de todos los factores de la MUD, según un comunicado leído por el dirigente de Voluntad Popular, Freddy Guevara.
Si bien no se ofrecieron detalles de ese gobierno, es posible localizar datos precisos sobre sus características tal como las que viene proponiendo el padre jesuíta Luis Ugalde, exrector de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) y artífice del acuerdo que facilitó el golpe de Estado de abril de 2002.
Estas son algunos de los elementos clave de ese gobierno paralelo en este momento:
1.- Para salir de este régimen sin esperanza hace falta cuanto antes un gobierno nacional de transición que tome de modo excepcional medidas de emergencia y convoque elecciones democráticas, previo saneamiento con remoción de los ilegales magistrados del TSJ y de los miembros serviles del CNE, precisa Ugalde en un artículo divulgado el 19 de junio pasado.
2.- Ese gobierno tendrá un carácter neoliberal y proempresarial y las elecciones se postergarían hasta un año, pues antes sería necesario “atender con apoyo internacional la creciente emergencia humanitaria propia de una postguerra, liberar a todos los presos políticos, abrir el regreso de los exiliados, convocar a los empresarios a la activación de la emergencia productiva y atraer a los inversionistas con un nuevo espíritu democrático, libre iniciativa y garantías jurídicas. Urgen el refinanciamiento de la deuda y multimillonarios préstamos económicos para insumos productivos y para necesidades vitales de consumo.”
3.- El gobierno planteado se establece sobre un Pacto de Gobernabilidad, que contemple el reconocimiento para quien triunfe en las elecciones por realizarse así como un programa básico de salvación nacional y de reconstrucción, de no menos de 10 años, apoyado por gobernantes y opositores democráticos.
4.- En la propuesta queda claro que el presidente Maduro no formaría parte de ese gobierno, pese a decir que incluye “a opositores y chavistas, unidos en un esfuerzo de salvación nacional.” Evidentemente esa es la razón por la que la mediática insiste en denominar y posicionar en el escenario global como el “chavismo crítico” a los actuales aliados de la MUD con raíces en Marea Socialista y algunos exministros.
5.- Ese gobierno estará basado en la Constitución y “en lo que nos queda de instituciones legítimas”, es decir la Asamblea Nacional y la Fiscal General, Luisa Ortega, “convertida en defensora de la democracia”.
6.- Ambos factores actuarán unidos “en el rescate del CNE y TSJ”, tal como efectivamente han intentado hacerlo. De hecho, en la declaración del lunes se anunció que el viernes la AN estará designando a los nuevos magistrados del TSJ.
7.- Para Ugalde la Fuerza Armada está obligada e invitada a asumir su responsabilidad constitucional y democrática a cambio, supuestamente, de recuperar “los perdidos reconocimientos y afecto del pueblo.” Sin embargo sabe que la FANB está al lado de la propuesta de sociedad desarrollada por Hugo Chávez, razón por la cual en diciembre pasado aseguraba que era necesario “un resquebrajamiento militar”.
8.-El recurso del “gobierno de unidad nacional y de transición” no es original de Ugalde, sino que forma parte de la metodología del llamado “golpe suave”, desarrollada por el investigador estadounidense Gene Sharp, cuyos manuales sobre como derrocar un gobierno utiliza toda la oposición venezolana.
9.- Sharp, propone la creación de “gobiernos paralelos” en su libro “De la dictadura a la democracia” y explica que tal estructura funcionaría de manera creciente como un gobierno rival, al cual la población y las instituciones de la sociedad le prestarían lealtad, obediencia y cooperación. Eso explica la tendencia opositora de promover y formar estructuras e instituciones paralelas. Eventualmente estas estructuras podrían reemplazar plenamente las instituciones formales.
10.- Sharp también se refiere al aspecto económico y advierte que “hay que cuidar que los malestares económicos de veras podrán remediarse luego de que termine el gobierno que se busca derrocar. Si no, la desilusión y el descontento cundirán, a menos que se provean soluciones rápidas durante el período de transición”.
DesdeLaPlaza.com/LaTabla