El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó una resolución que busca el cese de los asentamientos israelíes ilegales en Palestina. Esta fue aprobada por unanimidad y con la abstención de Estados Unidos, lo que generó tensión en su alianza con Israel.
Los asentamientos israelíes son colonias construidas por Israel a partir de 1967 en los territorios conquistados durante la Guerra de los Seis Días.
Estas se construyeron en tierras pertenecientes a Egipto, Jordania y Siria. Israel se retiró de algunos de estos territorios en 1981 y en 2005, pero estas han incrementado su número y población, desplazando los habitantes originales con demoliciones y expropiaciones sin indemnización de las tierras de estos.
Parte de ese territorio es Cisjordania y la Franja de Gaza, donde este país fue extendiéndose por la región palestina ocupada.
Actualmente hay más de 200 asentamientos israelíes y algunos de ellos son grandes ciudades que cuentan con una población de más de 600 mil colonos.
Los colonos israelíes se han instalado en Palestina porque las viviendas son más baratas y el gobierno los insta a tomar ciudades como Jerusalén del Este. Otros, más religiosos, consideran una promesa divina vivir en territorios bíblicos como Judea y Samaria.
Estos asentamientos han sido respaldados por todos los gobiernos israelíes desde 1967, pero son considerados ilegales por el derecho internacional debido a la violación de la Convención de Ginebra.
La Corte Internacional de Justicia, el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU y la Cruz Roja han rechazado los asentamientos, porque acarrean que el pueblo palestino tenga que realizar desplazamientos forzados, divisiones y fragmentación de la tierra.
DesdeLaPlaza.com/Agencias/KM