Repleto de centros comerciales, centros empresariales y conjuntos residenciales, el municipio Chacao, al este de la ciudad de Caracas, entre el Distrito Capital y el estado Miranda, continúa construyendo en sus espacios nuevos proyectos arquitectónicos que contemplan tanto desarrollos urbanísticos como grandes emporios comerciales.
DesdeLaPlaza.com recorrió algunas construcciones que se desarrollan en diferentes zonas de este municipio para conocer más acerca de estas obras.
A la altura de la Urbanización Campo Alegre se construye desde mayo del año 2014, el Centro Empresarial La Esmeralda, un complejo mixto que comprende tanto oficinas como locales comerciales.
Jesús Siero, ingeniero civil de esta obra, al preguntarle ¿Por qué invertir en Venezuela? Afirmó que hay que apostar por el país y creer en el desarrollo, “Venezuela es nuestra casa y si no apostamos a ella es mejor irse. Pero creemos en nuestro país, en sus potencialidades y por eso estamos desarrollando esta gran obra que estará lista entre diciembre de 2018 y el primer trimestre de 2019.
Siero expresó que el empresariado venezolano debe creer e invertir en el país, “Venezuela tiene una gran riqueza: su gente, sus recursos naturales, su cultura, eso es lo que nos compromete a continuar y a edificar un futuro”.
No obstante, diversos actores políticos y económicos aseguran que Venezuela es un país en crisis al borde del colapso humanitario, donde hay escasez de alimentos, medicamentos y también de materiales de construcción. Entonces la pregunta es ¿Cuáles son las verdaderas razones para invertir en un país en “crisis” como Venezuela?
Al respecto, el sociólogo y economista político Luis Salas, en entrevista para DesdeLaPlaza.com explicó que “la razón principal es el blanqueo de dinero que viene de la especulación, que no se puede declarar y se destina para esos fines. También tiene que ver con empresas que no pueden repatriar sus capitales o que no pueden fugarlo, en el caso de empresas venezolanas, y ese dinero lo invierten en bienes raíces que tienden a revalorizarse por el efecto de la propia especulación inmobiliaria y de la inflación que genera”.
Destacó que otro aspecto fundamental es que en la Ley de Impuestos Sobre la Renta no se carga el patrimonio, lo que conlleva a la evasión de impuestos, “entonces tu inviertes ahí y eso te genera dividendos como inversor pero no te genera renta gravable como pagador de impuestos, también es una manera de evadir impuestos”, subrayó.
En el municipio Chacao no solo hay una o dos construcciones en marcha, sino que desde el año 2011 se invierten cuantiosas sumas de dinero en emporios comerciales, empresariales y hoteles para personalidades catalogadas como VIP.
Hecho contradictorio, tomando en cuenta que durante la reciente emergencia eléctrica en el país, dueños de centros comerciales reseñaron que sus inversiones iban en picada por la restricción horaria que se estableció en estos grandes comercios.
La Cámara Venezolana de Centros Comerciales, Comerciantes y afines (Cavececo) en abril de 2016 informó que el tránsito en los 163 centros comerciales afiliados habrían disminuido 30%.
En febrero de 2016, el gobernador de Miranda Capriles Radonski expresó que “el Gobierno quiere quebrar los centros comerciales con el racionamiento eléctrico”, según reseña el Portal LaPatilla.com. Y es que desde 2014 noticias como ésta abundaron en los medios de comunicación. Señalando que entre el control cambiario, los controles gubernamentales, las numerosas inspecciones o la escasez de productos, los centros comerciales de Caracas registran un deterioro de sus servicios o el cierre de varias de sus tiendas, como refiere nota de prensa de Notimex, del 12 de noviembre de 2014.
Entonces, si desde hace un par de años el negocio de los centros comerciales en el país, tras las razones expuestas por ciertos sectores, ya no era tan rentable ¿Por qué continuaron las inversiones y construcciones de emporios comerciales y empresariales?
Aparentemente la coyuntura económica que vive el país no ha sido impedimento para que en el municipio Chacao, empresarios nacionales y extranjeros continúen invirtiendo en grandes desarrollos arquitectónicos, donde la tecnología y la ingeniería se combinan en la construcción de nuevos espacios que presuntamente se desarrollan para los ciudadanos que residen y/o trabajan en el municipio. Pero vale la pena preguntarse ¿Quiénes realmente se benefician de estas obras multimillonarias? ¿Qué se esconde detrás de estas inversiones?
En ese sentido, Salas aseguró que habría que revisar bien quiénes son los inversores de esas construcciones, “porque no necesariamente son los mismos quienes construyen y quiénes invierten (…) Lo que nosotros debemos determinar es cuáles son los sectores que están invirtiendo allí, quiénes son los inversionistas reales más allá de los nombres que aparecen”, manifestó.
“Por los lados de la Castellana están inmobiliarias y constructoras que tienen mucho tiempo en Venezuela, como el caso del Grupo Constructor NSM, que son quienes construyeron Paseo Las Mercedes, el Centro Comercial el Recreo y ahora están a cargo del Recreo La Castellana, pero ellos son los constructores, lo que hay que ver es quiénes están invirtiendo en esas obras”.
El economista resaltó que ante la crisis en Venezuela en donde hay una escasez de materiales de construcción, las expectativas de un mercado en esa situación no son las más favorables para invertir tanto en hoteles de lujo como en centros comerciales que son además para sectores considerados consumidores de alta gama. “Lo que uno ve que se está desarrollando en La Castellana está dirigido a un segmento de alto poder adquisitivo, no es un centro comercial cualquiera”, apuntó.
“O hay un sector que tiene expectativas que la cosa va a mejorar, y que no es tan grave como dicen, o en todo caso es lo que yo creo más probable, una combinación de eso de las expectativas de que el mercado mejore en algún momento, pero también como una manera de protegerse frente a la crisis, es decir, sectores que tienen grandes patrimonios invierten en bienes raíces porque es como una especie de reserva de valor. Estos sectores construyen torres, centros comerciales, etc. Y que además no pagan impuestos, por eso es un negocio redondo”, enfatizó.
El Centro Comercial Recreo La Castellana, es una enorme construcción que se edifica en la Av. Francisco de Miranda, a la altura de la Av. Principal de Bello Campo y la Calle Coromoto, en la Urbanización Bello Campo, desde el año 2011, proyecto que comprende un hotel, un apéndice del hotel llamado Suites, donde se desarrolla un espacio VIP; un centro empresarial y un centro comercial en un área de 97.956,96 metros cuadrados.
Resulta interesante que en un país en plena crisis humanitaria se construya una obra multimillonaria como esta, a cargo del prestigioso Grupo Constructor NSM, C.A. establecido en el país desde 1975 y que también ha desarrollado obras arquitectónicas y de ingeniería civil en otras ciudades como Miami.
En ese sentido, Epifanio Chrinios, obrero de esta obra, quien trabaja allí desde hace 4 años, manifestó sentirse agradecido por esta construcción que le ha brindado estabilidad laboral desde que inició en este proyecto. “Tengo 4 años aquí trabajando, es una gran obra y nosotros los trabajadores queremos verla terminada, ver el fruto de todo nuestro esfuerzo allí”, expresó.
Sin embargo, en noviembre de 2015, obreros del Grupo Constructor NSM, C.A. junto al Movimiento de Integración Socialista Unido de Trabajadores de la Industria de la Construcción (Misutic) denunciaron que fueron obligados a renunciar tras amenazas de bandas armadas. Los extrabajadores aseguraron a los medios de comunicación que la empresa no respetaba el derecho a la libre sindicalización, el fuero paternal ni el decreto presidencial de inamovilidad laboral. La denuncia también contempla el incumplimiento con el Seguro Social obligatorio, y el riesgo al que están sometidos algunos trabajadores con ciertas condiciones físicas.
Estas son algunas de las inconsistencias con las que nos encontramos. Además residentes y quienes transitan por el municipio quienes expresaron su preocupación por la habilitación de espacios verdes en vez de ostentosos centros comerciales y a quienes les preocupa el colapso del tráfico que forma parte de las consecuencias de estas construcciones en Chacao.
Adicional a estas obras multimillonarias en otros puntos del municipio Chacao también se desarrollan diversas construcciones: al lado de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura, del TSJ, se ejecuta una obra. Asimismo, en la principal de La Castellana se construye un alto edificio de oficinas y en El Rosal nos encontramos con un par de proyectos en ejecución. Evidenciando que la “crisis” económica venezolana no afecta a las grandes empresas de la construcción en el país.
DesdeLaPlaza.com/ Beriozka Fereira