Por: Rómulo Hidalgo
Estamos viviendo una etapa sumamente importante en nuestro país, ya que en estos momentos de escasez de productos y materias primas importadas es cuando la producción nacional tendrá la oportunidad de florecer, el verdadero emprendedor con visión nacionalista de creación y manufactura de productos de alta calidad, tendrá la oportunidad de hacerse conocer. En el campo de alimentación ya se están viendo los frutos, se encuentran cada día nuevas marcas en el mercado, aunque con precios aún nada competitivos, por eso de que son pequeños y medianos empresarios que no tienen acceso a materias primas lo suficientemente económicas por el bajo volumen o capacidad de compra que se tiene cuando uno está comenzando.
Aún así y con este escenario tan positivo desde mi punto de vista, aunque para los más pesimistas es el fin del mundo, hoy en esta puerta que nos abre el mercado a los que sí queremos emprender y estamos dispuestos a comernos la verdes, para luego disfrutar y saborear las maduras, hay que reconocer que falta un poco de impulso, el cual no solamente debe ser económico, sino sobre todo moral y comunicacional.
Es necesario generar una gran campaña comunicacional que haga al venezolano querer consumir el producto nacional, tomando en cuenta que así y solo así se podrá fortalecer una industria nacional estable, que la responsabilidad no solo viene de parte del fabricante sino también de parte del consumidor, que es necesario aprender a confiar y a amar el producto hecho por venezolanos, porque hay que ser específico en el tema. HECHO POR VENEZOLANOS DE VERDAD, no por transnacionales que tienen puntos de fabricación en nuestro país, que de nacional no tienen nada, ni las intenciones, ni el capital, ni los productos, aunque sus grandes campañas comunicacionales nos hagan creer que se apegan a nuestras culturas y que son productos naturales.
Al venezolano hay que meterle no solo en la mente sino en el corazón las ganas de consumir lo nuestro, lo fabricado e inventado aquí, que es un proceso de crecimiento en el cual se cometerán errores y que no por eso se deberá dejar de apoyar lo hecho en casa, nuestra casa que es este gran país.
Esta tarea tiene que cumplirse como parte importante del desarrollo de la industria nacional, entre el Estado y los industriales deben generar una gran campaña que le diga a la gente APOYA LO NUESTRO, CONSUME PRODUCTO NACIONAL, COMPRA VENEZOLANO, AMA LO HECHO AQUÍ.
Si nos ponemos a mirar un poquito hacia afuera, nos podremos dar cuenta que solo aquellos países que han apoyado lo suyo han crecido industrialmente, solo porque creen en lo que pueden hacer y en lo que tienen.
Es una tarea de todos y entre todos, estado, industria y pueblo.