¿Sabías que tu cerebro te engaña? Si no lo crees observa fijamente las imágenes de arriba, ¿Qué ves? ¿Qué sensación te da mirar atentamente estas ruedas? Seguramente pensarás que las figuras se mueven, pero lo cierto, es que nada de eso ocurre, en realidad las imágenes nunca se mueven, solo que el contraste de sus colores engaña tu mente y estimula excesivamente a tus ojos para hacerte creer que tienen movimiento propio. A este proceso se le conoce como impulsos cerebrales erróneos.
En ese sentido, cuando piensas buscar la solución a un problema o decidir sobre qué hacer ante cierta circunstancia, el cerebro analiza los recuerdos y opta por indagar soluciones similares del pasado que se adapten a esa situación.
Este proceso se conoce como heurística, es aquello que nos facilita tomar decisiones sin pensar mucho, sin embargo, también te puede traer los recuerdos malos del pasado lo cual podría implicar que tomes la decisión equivocada.
Automatización
¿Alguna vez has sentido la sensación de no recordar cómo fue que llegaste a tu casa después de regresar de la universidad o tu trabajo?
Cuando llevas a cabo acciones del quehacer diario de forma rutinaria y de repente sientes que se te olvida cómo lo hiciste, es debido a que esas acciones crean los denominados “paquetes” de información almacenados en tu cerebro, estos, a su vez, se reinician automáticamente cada vez que vuelves a hacer lo mismo.
La predisposición influye en el pensamiento
Quizás hayas escuchado la frase “una mentira dicha mil veces se convierte en realidad”, y si no crees que esto pueda ser posible, aquí te explicamos realmente lo que sucede.
Cuando tienes una predisposición sobre algo, por ejemplo que los extraterrestres existen, indagarás en Internet o libros, información que apoye tu creencia y omitirás los estudios científicos que se han realizado al respecto afirmando que no existen. Por tanto, al pasar el tiempo tu cerebro estará entrenado solo para creer lo que das por hecho.
Saciedad Semántica
A veces sin darte cuenta, llegas a repetir una palabra tantas veces que pierde todo su significado, pero no hay de qué preocuparse ya que esto es normal porque se trata de un fenómeno psicológico denominado saciedad semántica. En este caso el cerebro se activa para buscar dicha palabra y localiza significado de la misma, pero al repetirla frecuentemente en cortos periodos de tiempo queda incapacitado para ubicar su definición.
Temor
¿Y quien no ha sentido temor alguna vez en su vida? En ese momento tu corazón se acelera, y te prepara para responder a ese escenario de peligro, ya sea para huir o enfrentarlo, pero el cerebro inmediatamente envía un impulso que activa el miedo y es por eso que sientes que no puedes mover ni un dedo o peor aún, no sabes qué acción tomar.
Canciones pegajosas
Existen canciones para todos los gustos, sin embargo, puede que no te guste alguna y la califiques como horrenda, pero de repente te ves cantándola a media, como alguna frase o parte del coro, pues esto también tiene su explicación científica debido a que el cerebro opta por volver a esa información no concluyente, por tal motivo, en el momento en que vuelves a escuchar esa canción muy pegada, no la recuerdas toda sino una parte de la misma, con lo cual tu cerebro regresa a ese tema y lo repite por partes tratando de encontrar su inicio hasta llegar a su fin.
No recuerdas rostros
Alguien te saluda y te dice: – Hola, ¿cómo estás?, tiempo sin verte- ¡Oh oh! ¿Y este quién será? Finalmente, saludas para simular que no lo has olvidado. Esta es una reacción muy normal, ya que el cerebro almacena la información codificada, y para acceder a la misma, debe primero descifrar ciertos códigos. Por ejemplo, cuando estas estresado tu cerebro no logra descifrar esos códigos tan rápido como para recordar en cierto momento a alguien o algo.
Ver y escuchar cosas
En ocasiones, cuando el cerebro queda desprovisto de información sensorial, ya sea a través de: la vista, el olfato, el oído, el tacto o el gusto, se confunde y comienza a generar ilusiones que ocuparán ese espacio.
Este podría ser el motivo por lo que crees ver fantasmas o sientes cosas extrañas en el transcurso de la noche, lo cual genera solo alucinaciones.
Ejercita tu cerebro
Ahora para que ninguna de estas cosas anteriores te suceda, debes mantener tu cerebro ejercitado: lee y resuelve crucigramas, toma mucha agua para mantenerte hidratado, estas actividades permitirán que las millones de neuronas que posee el cerebro tengan un funcionamiento más óptimo para llevar a cabo actividades de la vida cotidiana.
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