Las muertes de figuras emblemáticas como Gandhi o Robert Kennedy, el comienzo de relevantes guerras y el hundimiento de importantes barcos han marcado la historia bajo los años bisiestos. Pero, ¿De qué trata el temible año bisiesto?
Según reza la creencia popular «Año bisiesto, año siniestro». Cada 4 años el calendario agrega un día, sin embargo cada año bisiesto viene acompañado de innumerables mitos que conviven con nosotros durante los 366 días esto debido a que a lo largo de los siglos, el 29 de febrero ha traído de la mano algunos terribles acontecimientos que han sentado un precedente difícil de eliminar: catástrofes, asesinatos, y toda clase de desastres han sacudido la historia de cada año bisiesto, provocando así que estas fechas sean consideradas de mal augurio.
Según explica el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Manuel Manianes, la colocación de los años bisiestos, uno de cada cuatro años, fue implantado por Dionisio «El Pequeño», un monje de Turquía que en torno al año 200 (d.C) halló la diferencia entre lo que contaba el calendario juliano (basado en el movimiento aparente del sol para medir el tiempo.) y la realidad, y por el que si ese desajuste no se corregía, en el plazo de 500 a 600 años el solsticio de verano (momentos del año en los que el Sol alcanza su mayor o menor altura aparente en el cielo) podría suceder en el solsticio de invierno y viceversa.
Cada año la tierra pierde 6 horas y el año bisiesto permite recuperarlas. El 29 de febrero es el día seleccionado para corregir el desfase natural de cada uno de nuestros años (que en realidad duran 365 días, 5 horas, 48 minutos y 45,25 segundos). La acumulación de estas horas en un solo día de cada cuatro años nos permite mantener el calendario, porque de no existir el 29 de febrero, perderíamos 25 días cada siglo, provocando un importante desajuste en las estaciones del año. Y es que de no haber inventado los años bisiestos hoy estaríamos en julio del 2017.
Mira el vídeo donde reseña las grandes tragedias:
Calendario Gregoriano: otra forma de calcular el año bisiesto
Por otra parte, el calendario gregoriano tiene otra regla para explicar cómo calcular un año bisiesto: si es divisible entre 4, a menos que sea divisible entre 100. Sin embargo, si un año es divisible entre 400, también resulta año bisiesto.
Esto elimina los años finiseculares, es decir, que termina un siglo, donde han de terminar en 00 y cuyo siglo no es múltiplo de 4.
De tal forma, sin entrar en más detalles numerológica, lo que, aparentemente, parece un simple mecanismo de corrección se ha transformado en toda una inspiración de leyendas y mitos. Y para quienes no creen en estos fenómenos, los años bisiestos han venido acompañados de sucesos y desastre.
Acontecimientos que han marcado el año bisiesto como catastrófico
Hundimiento del Titanic
Para iniciar ejemplos se presenta el fatídico año bisiesto 1912, cuando el Titanic al hundirse frente a las costas de Terranova el siglo pasado, se convierte en una de las mayores catástrofes de la historia con más de 1500 víctimas a sus espaldas y una serie de errores que indignaron y conmocionaron al mundo entero. Su leyenda sigue viva al día de hoy, alimentando el mito de los desastrosos 29 de febrero.
Guerra Civil en España
Un año bisiesto ocurrió uno de los sucesos más catastróficos de la historia española. Hablamos de la Guerra Civil, iniciada en el año 1936, que también sumaba un día más a su calendario. El conflicto duró dos años, 8 meses y 15 días, dejando tras de sí miles de muertos y a un país sumido en la más absoluta pobreza.
El campo de exterminio de Auschwitz: una de las mayores catástrofes de la historia.
Después de cuatro años, en 1940, el año bisiesto traía consigo la construcción de uno de los lugares que albergaron las mayores atrocidades de la historia. El campo de exterminio de Auschwitz también se sumaba a un año que agregaba un día más en el calendario. Auschwitz fue el mayor centro de concentración de la Alemania nazi, donde se calcula que llegaron cerca de 1.300.000 personas y fueron asesinadas más de 1.100.000.
Líderes mundiales
Sin embargo, las guerras y desastres no son los únicos que han convertido a los años bisiestos en temporadas de malos augurios debido a que durante estos períodos se han acumulado un buen puñado de sonados asesinatos que han acrecentado su mala fama.
Mahatma Gandhi
Los años bisiestos no le dieron gran suerte al político y líder espiritual Mahatma Gandhi, que murió el 30 de enero del año 1948. El líder fue asesinado de un disparo en Birla Bhavan (Nueva Delhi) mientras se dirigía a una importante reunión para rezar. El culpable, Nathuram Godse, un hinduista radical que en teoría estaba relacionado con grupos ultraderechistas que acusaban a Gandhi de debilitar al nuevo gobierno.
Robert F. Kennedy
Y a quién un año bisiesto le traía la mala suerte era Robert F. Kennedy, senador de EE.UU. y hermano del también asesinado John F. Kennedy. Su muerte tuvo lugar un 5 de junio de 1968, en Los Ángeles, durante las celebraciones de las primarias de Californiy. Sirhan Sirhan, un joven inmigrante palestino de 24 años, disparaba en repetidas ocasiones un arma con la que firmaba la muerte inmediata del candidato demócrata a la presidencia del país.
Durante ese mismo año, quien caía era el pastor y activista Martin Luther King. El 4 de abril, a las 18.01 horas, un segregacionista blanco asesinaba a la importante figura a favor de los derechos de los afroamericanos en el balcón del Lorraine Motel en Memphis (Tennessee) de un tiro en la garganta.
John Lennon
También cae otra importante figura asesinada bajo un año bisiesto. El histórico cantante y compositor John Lennon moría el 8 de diciembre de 1980 en las puertas de su casa de Nueva York. Mark David Chapman, un recluso estadounidense, disparaba cuatro veces a Lennon poniendo fin a la vida de una importante figura y abriendo toda clase de leyendas.
A pesar de que los acontecimientos no acompañan la fama de los años bisiestos, hay otras creencias populares que sí que les otorgan un cierto halo de misterio. Antiguamente se creía que todos los nacidos en año bisiesto podían llegar a desarrollar poderes sobrenaturales.
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