En una fiesta privada realizada por el ídolo del pop, Justin Bieber y sus amigos en Melbourne, Australia, la noche del pasado domingo, presuntamente fue drogada la modelo de origen neozelandés, Bailey Scarlett. Así lo denunció la joven en su cuenta de Facebook.
Mediante un post de la aplicación social, la modelo de 18 años nacida en Nueva Zelanda comentó que tuvo que retirarse antes de tiempo del evento, luego de deshidratarse al ingerir un cocktail.
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Según informaciones de TMZ, Scarlett señaló que una persona le había colocado una sustancia en su vaso, cuando se distrajo para hablar con unas amigas, ya que minutos después se sintió mareada y su visión se puso borrosa. Al parecer la desesperación del cantante canadiense fue tal que cuando ésta, perdió la consciencia se acercó para verificar que le sucedía y le dijo: ‘Mírame a los ojos, estás bien, respira'», escribió en su mensaje.
Inmediatamente Scarlett salió del lugar y comenzó a sentirse peor, por lo que fue trasladada a un hospital en Melbourne.
Por su parte, el dueño del estudio, Jimi Wyatt, afirmó que la modelo nunca se desprendió de su copa, tal como lo registran las grabaciones de las cámaras de seguridad por lo cual considera que es falsa la acusación.
Entre tanto, la neozelandesa ya realizó la denuncia formal ante la policía y eliminó la cita de la red social por «cuestiones legales».
Por lo pronto, nadie en el entorno del artista emite algún pronunciamiento sobre este hecho el cual empaña su imagen después de tratar de recuperarla, luego de varios años de descontrol y causas judiciales.
DesdeLaPlaza.com/Infobae/NR