Gisele Bündchen está destrozada: su marido, Tom Brady, ha sido finalmente condenado en el caso Deflategate. Según la comisión encargada de investigarlo, el líder de los Patriots era consciente de que las pelotas que utilizaron en uno de los partidos clasificatorios para la Super Bowl estaban desinflados. Como resultado, estará sancionado sin jugar cuatro partidos y su equipo tendrá que pagar un millón de dólares de multa.
Lo peor de todo es cómo afectará esto a su matrimonio ya que Gisele, que se retiró de las pasarelas hace tan sólo unas semanas, está también en el ojo del huracán ya que son muchos los que se plantean si la modelo no estaría también al corriente de lo que sucedía.
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Según la prensa estadounidense, Gisele “está realmente preocupada de cómo podría afectar esta noticia a su matrimonio”, y es que la top podría haber perdido “algo de confianza en su marido”.
Por otro lado, también hay algunos que apuntan a que hace unos días se vio a la actriz sin llevar su anillo de casada, lo que apuntaría a una crisis en el matrimonio, pero lo cierto es que es normal ver a Gisele sin su alianza por cuestiones de trabajo.
DesdeLaPlaza.com/AP/AMH