El sacerdote jesuita Numa Molina, rector de la iglesia de San Francisco de Caracas, durante una entrevista para el programa José Vicente Hoy, dijo que la Iglesia tiene el deber de promover el encuentro y evitar el conflicto entre hermanos.
“Es doloroso para la gente cuando siente que cuando va a participar en una eucaristía es excluido por el discurso, altamente político con sesgo partidista, que no hace nada bien al pueblo y que no representa a La Iglesia”, rechazó.
Opinó que la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) debe replantearse su discurso y evocarse en ser el representante de todo el pueblo y no solo en el sector que se opone al Gobierno.
“La CEV dice que el país se está cayendo a pedazos, ¿acaso no ve esa familia que se le dignificó con un hogar amoblado, con acceso a la medicina? (…) Tampoco significa que no se debe ser crítico, pero se debe ser equilibrado”, expresó.
Y agregó: “En la medida que yo más irrespeto al otro, estoy contribuyendo en que nos alejemos. Yo creo que el dialogo es un elemento fundamental, pero no se dará mientras no se respete la forma de pensar del otro”
Presos políticos
En cuanto a los presos políticos, el sacerdote opinó que no se puede estar de acuerdo con la libertad de quienes atentan con la vida y el bienestra de los ciudadanos.
“Sobre todo está el respeto a la vida, Yo no puedo estar de acuerdo con aquel que atente contra ella. No puedo estar de acuerdo con la impunidad… No se puede dar libertad a quienes han cometido delitos contra otro ser humano. Es algo que debemos tener muy claro los cristianos”.
Familia, base de la sociedad
El sacerdote fue enfático en que la familia en un pilar fundamental para “construir el país que estamos soñando” y que es una institución que se debe recuperar con el apoyo del Estado y los medios de comunicación, que deben cumplir la labor de sembrar valores en la sociedad.
«No sé puede cosechar donde no se ha sembrado, no podemos esperar tener los mejores ciudadanos», aseguró.
DesdeLaPlaza.com /ABD