El latino oriundo de Nicaragua, Víctor Ruiz llegó a Miami desde que tenia 5 años y siempre le han gustado los hot dogs, o perros calientes. Por ello decidió abrir un local en el corazón de Miami para vender el producto que tanto le apasiona desde pequeño, colocándole por nombre «Sweet Dogs».
La idea según sus palabras era hacer un producto no tradicional que encuentras en Chicago, Nueva York o Los Ángeles sino algo distinto. Acotó que el secreto del hot dog es un pan que ellos mismos fabrican al igual que todos los ingredientes, los cuales buscan sean frescos para que cuando el cliente lo pruebe sienta otro sabor.
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Este emprendedor joven nunca imaginó que su negocio llegaría a ocupar el puesto número 12 en la lista de restaurantes favoritos del público estadounidense que publica anualmente Yelp, superando incluso a establecimientos de alta cocina de Nueva York que han obtenido estrellas de Michelin. Una historia increíble para un latino que ha sabido sobresalir en una ciudad de mucha competencia
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