Si tienes hijos lo más probable es que durante los meses de julio y agosto, un pensamiento (y preocupación) no deje de dar vueltas en su cabeza: la compra de los útiles escolares.
Bajo la coyuntura económica del país, hay que prepararse para esta inversión en la educación de los chicos, por eso lo recomendable es presupuestarse y en la medida de lo posible, evitar gastos innecesarios.
Sigue los siguientes consejos para que el inicio del año escolar no te vacíe los bolsillos:
1. Establece un presupuesto
Es fácil que la compra de útiles se te salga de las manos, por eso, marca un límite para ti y para tus hijos. Guíate con base en la lista y calcula una aproximación. Agrega un 10% de emergencia
2. Haz una cotización
En esta temporada es muy común que las papelerías ofrezcan diferentes precios. Antes de comprar, pregunta en varios locales para que tengas diferentes cotizaciones. Compáralas y elije la que te permita ahorrar más. Siempre puedes combinar opciones.
3. Apégate a la lista
Si la lista dice “Caja con 24 crayones de cera”, ¿por qué pagar por la de 96? Tu hijo de verdad no necesita el rojo ciruela ni el amarillo ocre. El regreso escolar ya será lo suficientemente costoso sin que te excedas.
4. Evita mercancía promocional.
Los artículos personalizados con caricaturas o celebridades suelen tener un costo más elevado que el de un genérico. Aunque tus hijos te pidan la mochila de Los Vengadores o la cartuchera de los Minions, evalúa si está dentro de tus posibilidades. Ponles un límite: dos artículos promocionales; el resto, lisos y sin publicidad.
5. Ahorra en libros de texto.
Los libros de texto son, probablemente, en lo que más tendrás que gastar al inicio de clases. De ser posible, cómpralos usados. Investiga con padres de una generación arriba de la de tu hijo si alguno está interesado en venderte el material, muchos recurren a esta medida para recuperar algo del dinero invertido y, generalmente, mantienen los libros en buen estado.
6. Reutiliza
Lo creas o no, lo más probable es que tengas varios útiles escolares en casa. Haz una revisión de cajones y closets y junta todos los objetos de papelería que encuentres en un lugar en el que puedas clasificarlos, la mesa del comedor, por ejemplo. Separa plumas, colores, lápices, crayones, tijeras, libretas, calculadoras, carpetas, etcétera. ¿Cuáles están en condiciones de ser reutilizados? Selecciónalos y táchalos de tu lista. Si te quedan extras, guárdalos en caso de extravíos a lo largo del año o entrégalos a alguien que lo necesite.
Y recuerda: No sacrifiques calidad por precio. Siempre es posible encontrar buenos artículos a bajo costo; tómate el tiempo de visitar diferentes establecimientos y comparar tus opciones. Recuerda, comparar es la mejor manera de ahorrar.
DesdeLaPlaza.com /Terra /ABD