Hay muchos temas de la cotidianidad de las que muy pocas veces se hablan, la basura es uno de ellos. Vivimos en una sociedad que ha sido reducida por el capitalismo a un espacio de compra-venta, y por lo tanto de generación de residuos y desechos sólidos. La vorágine del consumo hace de cada uno de los ciudadanos, simples actores económicos. La basura es expresión del modelo de producción y consumo impuesto en nuestra sociedad. Y más en éste tiempo de “lo desechable” y la obsolescencia programada.
La mayoría de nuestras ciudades se caracterizan por la acumulación de residuos y desechos sólidos en lugares inadecuados. Transitamos por calles y avenidas repletas de basura, escuchamos las quejas de los vecinos, las compartimos, pero nadie hace nada. Para la mayoría de los ciudadanos el problema es de los Alcaldes que no cumplen con su trabajo, para los Alcaldes es un problema de recursos, de camiones y personal.
Nunca entenderé por qué algunas personas ruletean toda la ciudad para lanzar la bolsa de basura en cualquier lugar. O aquellos que delante de sus hijos lanzan desperdicios en la calle. Pero el colmo son quienes lanzan la bolsa al container, y fallan, sin preocuparse por el lugar donde cae. Sin contar las playas, montañas y ríos de nuestro país, que luego de ser visitados quedan inundados de desechos. En temporada alta hay que hacerse espacio entre la basura para poder tener un lugar donde sentarse.
A los seis años recibí una de las más grandes lecciones de vida, fui por primera vez a un vertedero a cielo abierto. Mi mamá era maestra en la escuela cercana, mi papá era el responsable del Aseo Urbano de mi pueblo; y me llevaron a conocer esa dura realidad. En un instante te das cuenta de las miserias del consumismo, y donde viven o más bien sobreviven los más excluidos de la sociedad. Sin duda fue allí donde nació en mí la convicción ecosocialista de contribuir a salvar el planeta.
Hablar de los problemas comunes y buscar las soluciones debería ser una de las premisas de nuestra sociedad. Uno de los avances más significativos de los últimos años en materia ambiental ha sido clausurar los vertederos a cielo abierto y construir Rellenos Sanitarios. En esta nueva fase, cuando el principal reto de la Revolución es superar el modelo rentista, debemos sumar esfuerzos para potenciar la industria del reciclaje. Hablemos de basura, asumamos que con pequeñas acciones, se pueden generar grandes cambios.
DesdeLaPlaza.com/Heryck Rangel Hernández