Obama reconoce que Venezuela no es una amenaza para EEUU

El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó a la agencia de noticias EFE que no cree que Venezuela sea una amenaza a los EEUU y a la vez su país no es una amenaza al Gobierno de Venezuela, sin embargo mantiene las sanciones aplicadas.

Agregó que ni EE.UU ni el continente deben «mantener silencio» ante la situación en Venezuela, una nación que, a su juicio, se enfrenta actualmente a «retos enormes» y con cuyo Gobierno Washington sigue abierto al «diálogo directo».

A continuación te dejamos la pregunta realizada por la agencia al mandatario estadounidense y la respuesta del mismo:

EFE.- En marzo, emitieron una orden presidencial para imponer sanciones a Venezuela y declararon Venezuela como una «amenaza» a la seguridad nacional. Esa orden presidencial fue rechazada por algunos países de la región. ¿Por qué creen que esta orden fue la decisión correcta para enfrentarse a la situación de Venezuela? ¿Están abiertos a tener un diálogo directo con el presidente venezolano Nicolás Maduro?

Barack Obama.- Quiero hablar claro, nuestro interés principal y duradero es en una Venezuela que sea próspera, estable, democrática y segura. Queremos que el pueblo venezolano triunfe y prospere. Estados Unidos es el socio comercial más grande de Venezuela, con más de 40 millardos de dólares en comercio bilateral al año.

Tenemos conexiones muy profundas y duraderas entre familias y nuestros ciudadanos. Creo firmemente en el compromiso diplomático, y EEUU sigue abierto al diálogo directo con el gobierno venezolano para discutir cualquier tema de interés mutuo.

Venezuela se enfrenta a retos enormes en estos momentos. Durante muchos meses los vecinos de Venezuela buscaron promover un diálogo interno y una solución política a las divisiones que fragmentan a la sociedad venezolana, esperando prevenir que la situación de Venezuela afecte negativamente a otros en la región. Hemos apoyado de forma constante ese tipo de diálogo y seguimos viéndolo como el mejor camino adelante para Venezuela.

Eso no significa que nosotros, ni cualquier otro miembro de la comunidad interamericana, deba mantener silencio sobre nuestras preocupaciones por la situación de Venezuela. No creemos que Venezuela sea una amenaza a los EEUU y EEUU no es una amenaza al gobierno de Venezuela.

Pero seguimos muy preocupados por cómo el gobierno venezolano sigue esforzándose por intimidar a sus adversarios políticos, incluido el arresto y acusación por cargos políticos de funcionarios electos y la erosión continua de derechos humanos, de igual manera que deberíamos preocuparnos por tales hechos en cualquier otro país del mundo.

Por eso las sanciones que impusimos iban dirigidas a disuadir la violación de derechos humanos y la corrupción. Estas sanciones están enfocadas específicamente a las personas responsables de perseguir a los adversarios políticos, a restringir la libertad de la prensa, el uso de violencia y las detenciones y arrestos arbitrarios. Estas sanciones no quieren socavar al gobierno venezolano ni promover la inestabilidad en Venezuela.

De aquí en adelante seguiremos trabajando de cerca con otros (países) en la región para alentar al gobierno venezolano a llevar a cabo su compromiso de promover y defender la democracia en su gobierno, según se articula en la Carta de la OEA, la Carta Democrática Interamericana y otros instrumentos relevantes relacionados con la democracia y los derechos humanos. La cumbre esta semana en Panamá es un momento importante para los líderes de toda la región para reafirmar nuestro compromiso con estos principios y valores.

BANNER-SECCIONES-EEUU-reculo

DesdeLaPlaza.com/EFE/AMB