Muchas personas se quejan de los pelos de la nariz por cuestiones estéticas más que por otras cosas, pero lo que quizás no saben es que funcionan como filtros ante el polvo, el polen, las esporas, los virus y las bacterias.
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Estas partículas se adhieren a la húmeda superficie de los pelos de las fosas nasales, evitándose así que lleguen a los pulmones y causen infecciones.
Así que no tendrás más que sonarte la nariz -o sorber los mocos- para deshacerte de estas partículas potencialmente dañinas.
DesdeLaPlaza.com/BBC/AMB