Dinamarca se suele situar en los primeros puestos en los estudios sobre los niveles de felicidad. Científicos británicos de la Universidad de Warwick aseguran ahora que podrían tener la respuesta a este fenómeno: la mutación de un gen relacionado con la supresión de los niveles de serotonina, que aseguran que es poco frecuente en la herencia genética de los daneses.
El economista Eugenio Proto estudia por qué ciertos países ocupan los puestos más altos en las clasificaciones de felicidad. “Cuanto más lejos estás genéticamente de Dinamarca, menor es la satisfacción de la vida o el subjetivo bienestar del país. Cuanto más lejos se está de Dinamarca, mayor es la tristeza.”
Los expertos aseguran que también hay otras influencias, como el Producto Interior Bruto, la cultura, la religión o el estado del bienestar. Este último es particularmente generoso en Dinamarca.
“Hemos intentado quitar estadísticamente el efecto de la riqueza, el efecto del estado del bienestar, el efecto de la cultura. Lo hemos intentado hacer lo mejor posible, e incluso quitando este efecto, todavía tenemos una gran parte de esta variación de la felicidad entre los países que explica la genética”, sostiene Proto.
Muchos estudiosos de la genética estarían probablemente en desacuerdo, pero es un hecho que los niveles de felicidad en los países con esta mutación genética son menores.
“El mayor problema aquí, y ellos lo reconocen, es si este controvertido gen está ligado a la felicidad o a la depresión y este es el tema de muchos estudios genéticos hoy en día”, asegura Tom Gilbert, profesor de genómica en la Universidad de Copenhage.
Desde la Plaza/Euro News/AMH