Provocación: Acción hecha con intención de manipular, presionar y, muchas veces, humillar. Los provocadores cumplen su objetivo cuando logran doblegar la voluntad de la otra persona:
En Venezuela la minoría que perdió el poder político representa solo el 4% de la población (Un sector de politiqueros, y de empresarios que vivían a expensas de los mismos, de los dólares que solo producía nuestro petróleo, para ser más exactos).
Desde 1998 este grupo trazó su lucha por convertir la minoría en mayoría, y retomar el poder, con una sola arma, la provocación, la cual busca cuatro objetivos:
- Mantener a sus electores: A través de convertir ese 4% de privilegiados en el 30% de las personas que lograron una vida normal y en crecimiento en Venezuela (a costa del 70% de venezolanos y venezolanas que ni siquiera tenían garantizada la cédula de identidad que los registraba como tales)
- Sumar, a través del mismo recurso usado para manipular a sus electores: la identificación. ‘Soy un asalariado, pero soy clase media, nada que ver con los pobres (a pesar que ellos son asalariados como yo)’
- Corromper a la sociedad, a través de la ‘ingeniería social’: Diseñada a partir de la creación de desabastecimiento, que obliga a todos a corromperse, o bien vendiendo los productos ‘escasos’ a precios insólitos, o bien aceptando esos precios insólitos, con tal de obtener el producto (Franco Vielma explica en este video qué es la ‘ingeniería social’: https://www.youtube.com/watch?v=Bx46YXel8kQ)
- ¿Para qué adoctrinarte, nuevo votante, para que te guste el capitalismo que el mundo rechaza, si podemos corromperte?: Para sumar nuevos votantes, jóvenes como tú, no solo te ponen a hacer cola, también te envían mensajes que promueven todo lo contrario a hacer dinero honestamente, del modo más atractivo para ti (Sobre esto hablamos mucho más específicamente en nuestro artículo ‘TV 2016: Privaticemos lo comercial’: http://www.desdelaplaza.com/cine-tv/tv-2016-privaticemos-lo-comercial/)
¿Cómo enfrentar al provocador político – mediático?
Quienes tienen la responsabilidad, desde la TV, y los medios en general, no solo de informar, sino de orientar a Venezuela, deben ser las y los primeros en entender cómo funcionan el mercadeo político y las técnicas de manipulación, para poder hacer productos de calidad, que no salgan de las vísceras de la militancia, sino de la inteligencia de la comunicación:
– Al político, al dueño del medio, al empresario monopolista, no le duelen los problemas que tiene el país, ni les interesa resolverlos. Solo le interesa recuperar el poder político que perdió, y el económico que perderá, sin duda, una vez el poder popular y empresarios alternativos, que ya están comenzando a aparecer, rompan sus monopolios (el último poder que les queda, el poder de formar colas, y de convertir una economía normal en economía mafiosa y contrabandista)
– El político, como el medio de difusión, responde a un guión: ¿Tu primera reacción, productor, productora, ante quien te provoca desde la TV es gritarle al televisor (‘¡Qué estúpido! ¡Qué estúpida es!)? Si tu respuesta es afirmativa, es porque el mensaje hizo efecto en ti. Es posible que quien aparece en pantalla crea en lo que dice, pero recuerda que la TV, como cualquier otro medio de difusión donde se invierte mucho dinero, planifica su contenido con un guion, con una puesta en escena.
Cuando entiendes esto, ya estás listo en un 50% para hacer el trabajo de orientar al país, de responder a la provocación:
- Respira profundo al leer, escuchar o ver el material a desmontar: Productor, productora militante, estás haciendo una revolución, no esperes que quienes supieron derrotar otras experiencias socialistas con la provocación, te van a tratar distinto. Si ya sabes qué quieren (el poder político) y cuáles son sus intenciones (acabar con el socialismo, con toda solución humana) no tienes ninguna razón para alterarte. Un ejemplo concreto, fue la respuesta que el presidente Nicolás Maduro dio, no solo a ese fascista y defensor de corruptos que es Julio Borges, sino al poder popular convocado a esta sesión de la Asamblea Nacional, legítimamente alterado por la interrupción de Borges: https://www.youtube.com/watch?v=yYPGElXS0kw
- Nunca respondas inmediatamente, GRABA, haz tu trabajo, y luego transmite: La derecha no puede ser espontánea, porque su mensaje real es aborrecible para los electores (trabajadoras y trabajadores, en su gran mayoría) ellos planifican su salida, su declaración, y lo más importante, su respuesta, palabra por palabra. La solución es grabar las declaraciones, buscar los insumos de la realidad que la desmontan, editar, y transmitir. Si al político mentiroso le montan su discurso en equipo, no puedes tú pretender desmontarlo solo: https://www.youtube.com/watch?v=D0ICWmUN6eY
- Mide BIEN a quién vas a incluir en tu trabajo, y por qué: El equipo del provocador político o mediático tiene muy claro su objetivo: Que el provocador sea visto con importancia (o con miedo) dentro de la sociedad, para desventaja de su ‘provocado’. El provocador, con sus acciones, te obliga a sacarlo al aire, o bien por su gravedad (no se puede censurar una guarimba, cuando la vida de ciudadanos está en peligro) o bien por el chantaje (el provocador usa el arma barata de apelar a una supuesta ‘censura, para impedir que yo diga lo que tengo que decir’). Mide la magnitud de la acción y quién la provoca antes de actuar, no des pantalla a cualquier bolsa con ansias de poder.
- Si estás seguro que la intención del provocador no es el bienestar del país, sino criminalizar al gobierno actual ¿Para qué tomarlo en serio?: Muchos venezolanos, incluso simpatizantes de la Revolución Bolivariana, se indignaron por la carcajada que el entonces Ministro de Comunicación, Andrés Izarra, soltó en entrevista concedida al medio estadounidense CNN (medio de propaganda antichavista) ante estadísticas manipuladas por un sociólogo venezolano, evidentemente interesado en culpar al gobierno de la violencia que hemos vivido por más de 30 años en Venezuela. Cuando entendemos las intenciones electorales (campaña presidencial que Hugo Chávez ganó en 2012 al gobernador del estado más violento de Venezuela, Henrique Capriles Radonski) entendemos porqué el exministro no debía tomar en serio a sus interlocutores. Debe evitarse, sin embargo exagerar la burla, y ser pausado en la respuesta. Este manejo lo hace, eficientemente, un conductor de nuestra TV: https://youtu.be/5J7_pvXuxcM
- Trabajar como ‘network’ (red): Los provocadores se burlan, humillan, y amenazan impunemente, protegidos por una red mundial (calle, TV, mensajes multimedia, radios, prensa). Pretender que solo con un canal de televisión que ‘trabaja por su lado’ se va a contrarrestar toda una avalancha de medios que no necesitan tener el mismo dueño, o los mismos trabajadores, para saber lo que deben hacer, es, simplemente, una fantasía. Si el SIBCI, más la comunicación popular, son un sistema, como tal deben trabajar, construyendo la idea en colectivo, pero ejecutándola como una sola orden, en productos adaptados a cada medio.
Si logramos aprender a afrontar esta provocación, muy peligrosa, pero mucho más débil que hace más de 10 años, cuando las mafias político-mediáticas controlaban nuestra TV, ganaremos mucho más que una guerra económica: Ganaremos la guerra del control del pensamiento, que es, finalmente, la independencia definitiva de Venezuela.