Hoy termina la campaña electoral en Venezuela. Inicia el período de veda hasta el domingo 6 de diciembre, cuando se elegirá, en su totalidad a la nueva Asamblea Nacional (AN). 167 diputadas y diputados electos todos en sufragios populares.
Toda la campaña ha estado mediada por la situación económica de Venezuela. Para la oposición ha sido su leitmotiv. Mientras las fuerzas bolivarianas han debido responder que quienes los adversan son los causantes de la crisis.
El periodista argentino Marcos Salgado, corresponsal en Venezuela de la cadena HispanTv escribió (1): “Comicios que según la oposición servirán para que ese sector tenga control sobre el poder legislativo y, según el chavismo, será una victoria más para Chávez. Elipsis para significar que el pueblo no abandonará al chavismo, aún más allá de las penurias económicas de la hora, que según el gobierno se deben exclusivamente a la ‘guerra económica’ de los privados, que produce desabastecimiento e inflación”.
Con ese telón llegamos al cierre de los actos proselitistas.
La campaña opositora
No tiene rostros: Salvo contadas excepciones, la línea estratégica de la la Mesa de Unidad Democrática (MUD) se afinca en una serie de spot publicitarios que apelan al sentimentalismo y al miedo. Hablan de asesinatos, falta de alimentos y medicinas. Predomina el uso de actores que aparecen todos en zonas populares (casas precarias en barrios y/o cerros donde es más fuerte el chavismo)
Candidatos como Julio Borges (Primero Justicia), Henry Ramos Allup (Acción Democrática), Ismael García, Richard Blanco, etc.: No mostraron su rostro en afiches y otros medios publicitarios.
“Sus rabos de paja”, apuntó el politólogo Carlos Fréitez, “hace que sean unos impresentables”.
Como recurso alterno aparece en giras por el país, (atendida ampliamente por medios locales y extranjeros acreditados en Venezuela) Lilian Tintori, una animadora de televisión devenida referente política tras el encarcelamiento de su marido Leopoldo López, condenado en septiembre a 13 años de prisión por instigar a actos violentos tras una marcha opositora. Curiosamente ella, no es candidata a la Asamblea Nacional.
Discurso de campaña: La inseguridad, en su forma más genérica resulta el principal argumento de la oposición venezolana, para convencer a los electores. El desabastecimiento de alimentos y las largas colas para adquirir algunos productos, aderezan sus llamados. Juegan con el cansancio del pueblo humilde que padece los rigores de la “guerra económica”.
Cambio: Apelando al eslogan que resultó acertado para el recién electo presidente de Argentina, la MUD y sus candidatos aseguran que “éste domingo 6 de diciembre comienza el cambio”.
Así, sin explicaciones. Con ello, alcanzan al oposicionismo duro que corea en las calles “no importa quien nos gobierno” con tal de salir del chavismo.
Los candidatos a diputados de la oposición no presentan planes de gestión legislativa. Hablan en forma genérica de temas sensibles pero sin presentar propuestas o alternativas. Cambiar les parece suficiente… para sus seguidores.
Plebiscito: Al igual que en anteriores eventos electorales, la MUD (agrupación que nuclea algunos partidos de oposición y que ha tenido otros nombre en el pasado) asegura que las parlamentarias serán una derrota moral con la cual el gobierno bolivariano debería declinar. Aseguran su victoria y, en contra de la más elemental regla de una elección, aseguran que sólo un fraude podría derrotarlos. Lo que tensa las cosas antes del domingo, ya que de antemano, sólo darán crédito a un triunfo… no más que eso.
La campaña bolivariana
Chávez: La revolución bolivariana, atrincherados en una súper coalición de partidos denominada “Gran Polo Patriótico” (GPP) con el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) a la cabeza, echa mano de lo mejor que tiene: El legado de su líder histórico: Hugo Chávez. “El 6 de diciembre gana Chávez” dicen en su campaña, con lo que instan a la movilización popular para alcanzar la victoria.
Nombres: Ex ministros, periodistas, líderes escogidos en votaciones internas son presentados en afiches y televisión. Enarbolan sus cualidades profesionales, políticas y humanas para apoyar la consigna de que se trata de “las mejores mujeres y los mejores hombres”.
Muchos son líderes con amplia exposición mediática e impecable gestión en cargos públicos como los casos de Haiman El Troudi (ex ministro de transporte terrestre), Jacqueline Faria (ex jefa de Gobierno del Distrito Capital y con sólida reputación de buena gerente), Ernesto Villegas (periodista con amplísima credibilidad).
Plan conjunto: Los candidatos y las candidatas del GPP no llevan propuestas individuales. Han elaborado una propuesta conjunta de gestión legislativa que funcionará como palanca de la gestión del gobierno central. Se trata de un documento público, discutido y difundido ampliamente.
Además, firmaron un texto público que se denomina: Nueve compromisos de las candidatas y candidatos de la Patria con el pueblo de Venezuela (2).
Lo que perderemos: El GPP apoyado en la gestión de la Revolución Bolivariana, muestra los logros del gobierno como herramienta para demostrar con hechos los alcances de la labor social emprendida: viviendas, pensiones, transporte, salud son lanza y escudo ya que también se les dice a los electores qué es lo que está en riesgo de perder el control del parlamento.
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Ya todo está dicho. El domingo los venezolanos tendrán una nueva Asamblea Nacional. Cada actor ha tomado su posición en este escenario… sólo faltan los votantes… ¿Hará mella en la elección un spot publicitario en una Venezuela tan radicalizada políticamente?
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1.-Recta final para un campaña que se complica (Venezuela) / http://www.nodal.am/2015/11/recta-final-para-un-campana-que-se-complica-venezuela-por-marcos-salgado/
2.-Lea aquí los nueve compromisos de las candidatas y candidatos de la Patria / http://www.psuv.org.ve/portada/lea-aqui-nueve-compromisos-candidatas-y-candidatos-patria/
DesdeLaPlaza.com/Ernesto Navarro