Al final no hubo que esperar a que el reloj agonizara. Una frenética mañana de negociaciones entre el Partido Popular (PP), el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Ciudadanos ha culminado con un principio de acuerdo para que el socialista Patxi López sea presidente del Congreso.
La elección de López supone que, por primera vez en la historia de la democracia española, la presidencia del Congreso será ocupada por un partido que no ganó las elecciones legislativas.
El acuerdo supondrá que, además de la presidencia, los socialistas tengan también una de las vicepresidencias. Ciudadanos y Podemos tendrían dos puestos cada uno en la Mesa. De los ocho puestos, el PP tendría tres: dos vicepresidencias y una secretaría.
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Podemos no forma parte del acuerdo, de momento pero sumará dos puestos en la Mesa. Todos los demás grupos rechazan la exigencia del partido de Pablo Iglesias de formar cuatro grupos diferenciados con las candidaturas de Galicia, Cataluña y Comunidad Valenciana.
PP, PSOE y Ciudadanos beneficiados
Este acuerdo satisface al PP, PSOE y Ciudadanos, que han mantenido el peso de la negociación. El PSOE porque logra hacerse con la presidencia de la Cámara y una secretaría, que será para Micaela Navarro, presidenta del partido.
También satisface a Ciudadanos, que debido a sus 40 diputados corría el peligro de no tener cargo en la mesa y sale de la negociación con dos sillas: una vicepresidencia y una secretaría.
Además, la formación que preside Albert Riverase había manifestado partidaria de que el presidente de la Cámara fuera de un partido distinto al del Ejecutivo. Dada su lógica de que gobierne el PP en minoría para que arranque la Legislatura, su predilección era por el PSOE. De hecho, como ha informado este diario, no veían con malos ojos la propuesta de López.
En cuanto al PP, obtiene tres puestos en la Mesa (dos vicepresidencias y una secretaría), el que más ostentará dada su condición de partido más votado. Fuentes populares no ven con malos ojos el acuerdo porque consideran que en este órgano se confiere una mayoría de centro derecha (cinco votos entre PP y Ciudadanos).
No obstante, desde el PP remarcaban que el acuerdo no estaba cerrado. Mariano Rajoy, durante su discurso en la Junta Directiva del PP, ha dicho que confirmado el reparto 3 (PP) + 2 (PSOE, Podemos y Ciudadanos, cada uno), aunque ha remarcado que «no hay acuerdo cerrado».
El propio Pedro Sánchez ha subrayado en el Congreso que el PSOE «ha llegado a un acuerdo con Ciudadanos» y votará a sus candidatos y no votará a los del PP. «No hemos querido llegar a un acuerdo con el PP», ha dicho. Sánchez ha hablado con Albert Rivera, pero no con Mariano Rajoy. Rajoy y Rivera sí han hablado. Las negociaciones se habrían producido dos a dos, esto es, Ciudadanos con PSOE por un lado, y Ciudadanos con PP por otro.
Sánchez también ha hablado con Pablo Iglesias, pero no han alcanzado un acuerdo debido, como queda dicho, a la pretensión de formar cuatro grupos. «Lo importante son las políticas no los grupos políticos», ha sido el mensaje de Sánchez a Iglesias. El líder socialista espera llegar a acuerdos con Podemos más adelante «porque muchas de nuestras políticas son parecidas y vamos a hacer lo posible por aplicarlas».
Este principio de acuerdo deja fuera de la Mesa al Partido Nacionalista Vasco (PNV), que había mantenido contactos con PP y PSOE para intentar lograr un puesto.
DesdeLaPlaza.com/El Mundo-El País/COM