Rusia considera inaceptable que la regulación política en Siria se vea condicionada al cese del presidente Bachar el Asad, según manifestó el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, el lunes en una conferencia de prensa conjunta con su colega iraní, Javad Sharif. Lavrov insistió en que la posición de Moscú sobre la regulación del conflicto en Siria no ha cambiado y reiteró que el futuro de ese país debe ser resuelto por el pueblo sirio sobre la base de la declaración de Ginebra de 2013 y sin “injerencias externas”.
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El jefe de la diplomacia rusa reconoció, no obstante, que su país mantiene discrepancias con varios países del Oriente Próximo y Occidentales sobre el proceso de regulación del conflicto sirio y sobre el presidente El Asad. “Si alguno de nuestros socios cree que obligatoriamente se requiere ponerse de acuerdo previamente sobre el cese del presidente al final del periodo de transición, esta posición no es aceptable para Rusia. La decisión corresponde al pueblo sirio”, afirmó Lavrov. Ambas partes (el presidente sirio y la oposición), dijo, deben sentarse a la mesa de negociaciones y conseguir que todos los grupos de oposición estén representados en una delegación negociadora que pueda ofrecer una plataforma constructiva sin condiciones previas en conversaciones con la delegación del gobierno de Siria, dijo el ministro ruso.
Por otra parte, el ministro iraní calificó de “propaganda de EEUU” la información sobre la supuesta visita del general Kasem Suleimani a Moscú a finales de julio y la vinculó a la situación interna actual del congreso norteamericano, según informó la agencia TASS. Tanto Zarif como Lavrov emplearon el término “rumores” al referirse a la información sobre la supuesta visita del militar iraní. “Los rumores no son más que rumores”, dijo Lavrov. El general Kasem Suleimaní, comandante de una unidad de élite, no está autorizado a salir de Irán por su implicación en el programa nuclear de su país, según una resolución del consejo de Seguridad de la ONU.
DesdeLaPlaza.com/EFE/AMH