El pasado fin de semana se llevó a cabo un proceso electoral en España que definiría quien será el próximo presidente de ese país. En este caso fueron electos los 350 diputados que forman parte del parlamento para próximo período.
DesdeLaPlaza.com conversó con el periodista venezolano residenciado en España, Jorge Recio, para traerte las claves de lo que puede suceder en España a partir de los resultados parlamentarios en ese país:
1.- En España, a diferencia de varios países latinoamericanos, existe un sistema de gobierno llamado monarquía parlamentaria, es decir, se mantiene una figura muy antigua como la figura del rey como Jefe de Estado, y adicionalmente un parlamento electo por los ciudadanos que a su vez elige al presidente a través de la mayoría de los diputados, el presidente es el administrador del gobierno.
2.- En las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, se eligieron 350 diputados, de entre 4353 candidatos. También se eligió el senado, que no tiene voto en la investidura presidencial. Fueron convocados a votar más de 36 millones de españoles. La participación fue del 73%, es decir, 4 puntos por encima de la última elección general de 2011.
3.- Para investir a un presidente hacen falta por lo menos 176 votos de diputados, los resultados: PP (123), PSOE (90), PODEMOS y aliados (69), CIUDADANOS (40), otros partidos nacionalistas (28).
4.- Por primera vez no hay pactos ni coaliciones posibles con partidos nacionalistas que permitan al PSOE o al PP formar Gobierno e investir a un presidente.
5.- Esto implica un triunfo simbólico para el partido Podemos, quien al participar por primera vez en elecciones generales, se había propuesto como consigna «acabar con el bipartidismo», y aunque los dos partidos más grandes siguen obteniendo una buena cantidad de diputados, ninguno ha logrado la fuerza como para hacerse de los diputados necesarios para gobernar con algunas pequeñas negociaciones, como en ocasiones anteriores.
6.- Es aquí donde entran las alianzas, negociaciones y acciones de pactos entre partidos afines. Por ejemplo, es posible que Ciudadanos que es un partido de derecha, haga alianza directa con el PP para tratar de investir un presidente y gobernar en conjunto. Pero entre ambos partidos suman 163 diputados y aún no llegan al mínimo necesario, necesitarían el apoyo de unos 13 diputados más en partidos regionales para lograrlo. Ciudadanos ha manifestado que se abstendrá, de esta manera también favorece al PP porque con la abstención de sus 40 diputados, el número de votos necesarios por mayoría simple baja a 155 (350-40= 310/2=155). Pero el PP, ya sin los votos de Ciudadanos, tampoco llega a este número.
7.- De la misma forma los partidos de izquierda buscarán una coalición que logre nombrar al sucesor de Mariano Rajoy (PP). El PSOE, PODEMOS y sus aliados y otros partidos regionalistas de izquierda, llegan a sumar 172 diputados.
8.- En este caso entran en la escena los partidos nacionalistas de derecha (es decir, que buscan la independencia de sus regiones del reino español), estos partidos reclaman la la posibilidad de referendum por la independencia en sus provincias y, durante la campaña Podemos fue el único partido nacional que afirmó que apoyaría un referendum independentista en Cataluña, donde más fuerte ha sonado la idea independentista. Es por ello que este tipo de partidos (unos seis partidos que, sumados, cuentan con 15 diputados), a pesar de ser de derecha, seguramente se verán tentados a apoyar una coalición con Podemos, buscando el apoyo del ejecutivo nacional para realizar sus respectivas consultas populares vinculantes.
9.- Si estas confluencias se dieran (PSOE + PODEMOS y aliados + partidos regionalistas de izquierda + partidos nacionalistas), la coalición de izquierda lograría los votos necesarios para investir un presidente, y, quizás empezaríamos a ver una España que no se ha visto en los últimos 500 años, una pluralidad de pueblos y no una unidad imperial; ni en los últimos 300, una España no borbónica.
10.- Todas estas negociaciones se darán hasta el 13 de enero de 2016, fecha en que los nuevos diputados toman posesión de su cargo y cuando deba ser investido un nuevo presidente español. Si para la fecha ninguna coalición llega a tener la mayoría requerida (176 votos), se darán varios plazos de hasta dos meses para nuevas votaciones, si en ninguna se logra la mayoría, se convocarán a nuevas elecciones generales en una circunstancia nunca antes vista en España.
DesdeLaPlaza.com / Andrea Hermoso