Finalmente se decidió. El magnate Donald Trump anunció este martes que se suma a la larga lista de los que participan en la carrera por conseguir la candidatura republicana en los comicios presidenciales de 2016 de Estados Unidos (EEUU).
En su conferencia Trump no solo crítico al actual presidente Barack Obama y su administración por su actual política en general; sino que prometió construír una súper muralla en la frontera sur que se comparte con México -forzando a los mexicanos a pagar por la misma- así como presentar una postura en los negocios más estricta con China. Entre otras mucha cosas más que el empresario intenta modificar en el país.
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De esta forma, Trump pone fin a más de dos décadas en las que había coqueteado con la idea de luchar por convertirse en el próximo inquilino de la Casa Blanca. El escenario del anuncio no ha sido casual: la lujosa Torre Trump en la Quinta Avenida de Nueva York, en donde detalló que el lema de su campaña será «Haz a América grande otra vez».
La confirmación de sus intenciones llega después de meses en los que ha ido dejando señales que indicaban que esta vez sí iba a presentarse. «Hemos perdido el respeto del mundo entero», declaró a través de un comunicado el 18 de marzo. «¡Soy el único que puede hacer a Estados Unidos realmente grande de nuevo!», agregó entonces.
Trump, que es dueño de varios hoteles y es una estrella de la televisión gracias a presentar «The Apprentice» en la cadena NBC -contrato que, por cierto, no ha renovado precisamente ahora-, ha captado en múltiples ocasiones la atención de la prensa gracias a sus duras críticas contra el actual presidente de EEUU. «Obama es el peor presidente de la historia de Estados Unidos», llegó a afirmar.
En marzo anunció la creación del llamado comité de exploración, que permite empezar a recaudar fondos y contratar personal. Trump dijo entonces que ya contaba con personal en Iowa, Nueva Hampshire y Carolina del Sur, los primeros tres estados donde se realizan elecciones primarias.
«Siento un gran amor por nuestro país, pero es un país sumido en problemas graves», dijo entonces en el ya citado comunicado en el que, además, abarcó temas que fueron desde la reconstrucción de la infraestructura hasta el saneamiento de la economía, pasando por la seguridad fronteriza y el fortalecimiento de las fuerzas armadas. «Los estadounidenses merecen algo mejor que lo que les dan los políticos, que son puras palabras y nada de acción».
Su anuncio llega sólo un día después de que Jeb Bush haya hecho lo propio. El exgobernador republicano de Florida se presentó como el candidato más cualificado para «arreglar» los problemas con que lidia el país porque, dijo, «ya lo he hecho antes» como gobernador de Florida, al tiempo que expresó su confianza en lograr un crecimiento económico del 4% y crear 19 millones de nuevos puestos de trabajo.
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