Aunque de forma grosera Estado peruano miente afirmando que medida fue rechazada y desinforma a todos los medios de comunicación que repiten noticia del Ministerio de Justicia.
A través de una medida cautelar, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó al Estado peruano adoptar medidas para garantizar la vida e integridad de 46 líderes y lideresas de comunidades y rondas campesinas de Cajamarca, así como de la familia Chaupe y del comunicador indígena César Estrada Chuquilín.
La petición fue formulada por el Pacto de Unidad de Organizaciones Indígenas del Perú en diciembre de 2011, tras registrarse una serie de agresiones en contra de los afectados por encontrarse en “situación de riesgo” debido a su oposición a la ejecución del megaproyecto minero Conga de la empresa Yanacocha.
Tras analizar las alegaciones de hecho y derecho presentadas por las partes, la CIDH consideró que se demostró “que los líderes y lideresas identificados se encuentran en una situación de gravedad y urgencia, puesto que su vida e integridad personal estarían amenazadas y en grave riesgo”.
Así lo explica en la Resolución 9/2014, del 5 de mayo, cuyo contenido se conoció recientemente y que concede al Estado peruano 15 días para que le informe sobre las medidas adoptadas para proteger a los defensores de las lagunas. Posteriormente tendrá que seguirle informando al respecto en forma periódica.
De este modo el organismo con sede en Washington dio toda la razón a las denuncias de amenazas y agresión que venían haciendo las rondas campesinas y que no eran atendidas por el Estado peruano.
Se cumplieron requisitos para una medida cautelar
Para adoptar la medida, la CIDH se basó en el estricto cumplimiento de tres requisitos.
El primero es el de gravedad, el mismo que se encuentra cumplido -señala el organismo en el párrafo 24- en vista de los continuos ciclos de amenazas, hostigamientos y actos de violencia que los lideres y lideresas identificados estarían recibiendo.
Todo ello en el marco de su trabajo con las comunidades y rondas campesinas en la defensa de sus derechos.
Desde la Plaza/ Eco Portal / AMH