Dio por finalizado un período de reflexión y por fin anunció su decisión definitiva. Del Bosque continuará siendo el guía de la Roja hasta la Eurocopa de Francia 2016. Lo dijo durante su visita a su campus de Salamanca. En la intimidad, alejado del ruido mediático de Madrid. Vicente sigue en su sitio, pero lo cierto es que hasta el último momento tuvo serias dudas. En algunos momentos pensó que lo mejor era renunciar al cargo de seleccionador.
Una reunión mantenida con los altos mandos de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) fue definitiva para tomar la decisión. Del Bosque se vio las caras con Ángel María Villar (Presidente) y Jorge Pérez (Secretario General). En este encuentro, los dirigentes le transmitieron su total confianza, instándole a continuar al frente de la Roja. Del Bosque expresó sus dudas sobre la conveniencia de seguir, pero finalmente aceptó.
El técnico dio el paso al sentirse plena y sinceramente respaldado por los dirigentes federativos. Fue un aspecto fundamental para despejar las dudas que tenía. Iniciar un nuevo proyecto, tras el fracaso del Mundial de Brasil, sin estar su entorno plenamente convencido hubiera sido un error. Cuando comprobó que ese apoyo era real, y con argumentos en la mano, Vicente decidió continuar al frente de la Selección Española.
Otro aspecto importante, mucho en el caso de una persona como Del Bosque, ha sido que a nivel social no se ha sentido señalado por la afición española. Obviamente, ha sentido la decepción y hasta el enfado de los seguidores, pero no ha vislumbrado un ambiente hostil hacia su persona, lo que cual también ha pesado a la hora de decidir.
Por otra parte, el estridente sonido de los medios de comunicación en muchas situaciones, no ha sido tal en cuanto a su figura. Ha sido blanco de críticas, muchas de ellas aceptadas por Vicente con naturalidad y como parte del juego, pero la prensa no ha convertido su figura en diana para lanzar sus dardos.
Desde la Plaza/El Confidencial/AMH