Edgar Martyrosian el repartidor de pizza, fue uno de los grandes protagonistas de la entrega de los premios Óscar el domingo.
Sin embargo, él no tenía idea de que en plena jornada laboral iba a terminar ganando 1.000 dólares de propina al llevar varias pizzas al teatro Dolby para grandes estrellas como Martin Scorsese y Brad Pitt.
Invitado al programa de Ellen DeGeneres, Martyrosian, dueño de Big Mama’s and Papa’s, una cadena de 20 pizzerías en Los Ángeles, contó cómo fue la experiencia que vivió durante la ceremonia.
«Pensaba que iba a entregar la pizza a productores, hasta que apareciste tú. Me dijiste que te siguiera y de pronto, estaba en el escenario«, relató a la conductora, que se lució con su particular humor durante la premiación.
Una de las escenas más divertidas fue verlo a Brad Pitt pararse de la butaca y dejar a Angelina Jolie por unos segundos para repartir las servilletas y los platos de plástico a otros actores, como Meryl Streep y Jennifer Lawrence.
Desde La Plaza/Infobae/MD